El Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS) pone en marcha la iniciativa Conectad@s, a través de la que adquiere y distribuye entre las residencias que gestiona varias tabletas que servirán a las personas ingresadas para mantener el contacto con sus seres queridos.
El Cabildo de Tenerife, a través del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS) ha puesto en marcha la iniciativa Conectad@s para que los mayores que se encuentran en las residencias que gestiona puedan comunicarse a través de videollamadas con sus familias y así hacer más llevadera la falta de contacto presencial con sus seres queridos, debido a las medidas decretadas para frenar la expansión del coronavirus (Covid-19).
La consejera insular de Acción Social y presidenta del IASS, Marián Franquet, explica que para ello se han adquirido nueve tabletas que se distribuirán en cada uno de los cinco centros que gestiona directamente el Cabildo. El hospital Febles Campos (Santa Cruz de Tenerife) dispondrá de cuatro, los hospitales Nuestra Señora de Los Dolores (La Laguna) y Santísima Trinidad (Icod de los Vinos) recibirán dos en cada centro, y la residencia de mayores de Ofra (Santa Cruz), una, ya que la mayoría de sus usuarios son autónomos y cuentan con teléfonos móviles propios.
Franquet señala que, por otra parte, se reanudarán, a través de vídeos, las sesiones de fisioterapia que quedaron suspendidas también como consecuencia de las medidas preventivas frente al coronavirus. A partir de ahora, se emitirán tutoriales diarios con ejercicios de rehabilitación y de gimnasia específica en las televisiones situadas en las salas comunes.
Se trata de ejercicios muy sencillos que los residentes podrán hacer por la mañana y por la tarde, en pequeños grupos, siempre de la mano de sus fisioterapeutas habituales, quienes se encargarán de personalizar las clases, estableciendo pautas individualizadas.
El personal del IASS trabaja también en la inclusión de otro tipo de actividades que complementen las rehabilitadoras y ayuden, en la medida de lo posible, a combatir la soledad ocasionada por el confinamiento y la falta de contacto físico de los mayores con sus familias y con el exterior mientras continúe el estado de alarma.