La portavoz del Partido Popular en el Cabildo de Tenerife, Zaida González, denuncia que el gobierno insular ha vuelto a mentir a los mayores de Tenerife sobre el supuesto proceso participativo anunciado por la consejera de Acción Social, Marian Franquet, después de “desmantelar el proyecto ANSINA sin tener ninguna alternativa al mismo”.
González indica que el grupo Popular en el Cabildo ha realizado una solicitud de información relacionada con este “supuesto” proceso participativo, y la respuesta que hemos recibido es que “hasta el momento actual no se ha iniciado ningún proceso participativo para la elaboración del Plan Integral de Personas Mayores de Tenerife”.
Para Zaida González y para el grupo Popular en el Cabildo este hecho es “una burla más de Marian Franquet a los mayores tinerfeños, a los que dejó sin actividades con el desmantelamiento del programa ANSINA en pleno confinamiento, sin plantear ninguna alternativa al mismo”.
Esta actuación de Franquet implicó, además, el despido de 57 trabajadores que llevaban más de 30 años prestando un servicio muy valorado por los mayores que eran usuarios del mismo.
A esta “mentira” se suma el anuncio de la propia consejera de Acción Social, asegurando que “los mayores tendrían actividades este verano”, aunque durante la última Sesión Plenaria del Cabildo “dejó de manifiesto que esto no sería así, y que los mayores no tendrían ninguna alternativa de ocio durante el verano de la mano de la institución insular”.
González reivindica que “el Cabildo se tome en serio a la población mayor de Tenerife, que además ha sido la más castigada durante la pandemia del coronavirus, y que se plantee, de una vez por todas, una alternativa seria de servicio a los mayores”, que “tal y como reclamamos los Populares no se centre en el ocio, sino que contemple también aspectos como el envejecimiento activo, el acompañamiento a los mayores que viven en soledad y la autonomía personal, entre otros”.
“Denunciamos de forma vehemente- indica Zaida González- las mentiras que Marian Franquet cuenta a los mayores, que bajo ningún concepto se merecen este trato por parte de sus gobernantes”. González concluye que “nuestro mayores se merecen respeto y atención, algo que Franquet debería tener muy en cuenta”.