El Partido Animalista critica las falacias e imprecisiones interesadas del comunicado de Loro Parque.
Hay multitud de informes que detallan los problemas físicos y psicológicos que sufren los animales en cautiverio.
El Loro Parque no es la primera gran entidad que se escuda en la falacia de un presunto interés de supervivencia de los propios individuos para justificar su explotación. Las orcas que utilizan en sus espectáculos son animales originalmente extraídos de su entorno natural, con la finalidad de hacer negocio de un desconocimiento generalizado y una falta de interés sobre las condiciones de vida adecuadas para su especie. La inhibición de los instintos y habilidades naturales de estos animales son el resultado de años de condicionamiento forzado en pro del ocio y del dinero, lejos de la labor altruista y solidaria que quieren aparentar a través de los argumentos de protección y perpetuación de su especie.
Al Partido Animalista le resulta “increíble que Loro Parque tenga personal profesional capacitado para enseñar acrobacias a animales de varias toneladas, pero que a la vez declaren que resulta imposible ayudarles para que puedan volver a alimentarse por sí mismos en su entorno natural”. Se culpa a estos animales de haber desaprendido a ser miembros su propia especie, y se les condena a depender del ser humano de por vida, mientras se sigue fomentando su procreación en cautividad para poder seguir explotando.
PACMA considera que si las intenciones reales de Loro Parque fueran las de ayudar a la procreación de una especie, sin ningún ánimo de lucro, no habría lugar a los espectáculos circenses que realizan en sus instalaciones, y no se les mantendría de por vida encerrados en pequeñas piscinas que imposibilitan su retorno al océano a causa de su hibridación o de la utilización de fármacos peligrosos para el ecosistema, a sabiendas de los riesgos que conlleva. Esto demuestra que en ningún caso la intención de Loro Parque, o de ningún otro parque marino, ha sido otorgar a estos animales la libertad.
Mientras Loro Parque afirma que no existen estudios determinantes sobre el malestar de las orcas en cautiverio y se respalda en argumentos de veterinarios y biólogos que viven de ese tipo de explotaciones, debemos recordar que sí que existen informes relacionados con problemas físicos relativos a los estrechos espacios que se les asignan, así como comportamientos violentos e inusuales que tienen lugar mayoritariamente en los parques acuáticos. Recordamos que en el año 2010, un adiestrador resultó muerto de forma violenta tras el ataque de la orca Keto durante una de las sesiones, hechos que quisieron ser ocultados por la empresa Loro Parque. Estos hechos se repitieron en el mismo año en SeaWorld, cuando la famosa Orca Tilikum, mató a su tercera víctima.
PACMA recuerda las palabras del parque sobre las protectoras y organizaciones de defensa de los derechos de los animales en las que aseguran que “son las únicas que desean acabar con la cautividad y que presionan a las administraciones y operadores turísticos”, sin tener en cuenta que precisamente este tipo de colectivos son los que se encargar de promover e instruir a los ciudadanos sobre el buen trato a los animales sin lucrarse de ello.
Por último, ante las declaraciones de Loro Parque asegurando en su comunicado que mantener a una orca en un santuario es tan caro que los propios ciudadanos tendrían que acabar pagándolo de sus impuestos, desde PACMA creemos que se trata de unas declaraciones totalmente fuera de lugar si tenemos en cuenta que los animales han sido criados, importados y explotados por una empresa privada para beneficio propio, y no se debería cargar a los ciudadanos con una responsabilidad que no les corresponde asumir.