La amenaza de cierre de las bases de Tenerife Sur, Las Palmas, Girona y Faro deja en el aire 1,4 millones de plazas aéreas entrantes, que ya estaban programadas para el primer semestre de 2020.
El inesperado anuncio de la compañía aérea irlandesa Ryanair, que ha informado sobre su intención de cerrar las bases de Tenerife Sur, Las Palmas, Girona y Faro (Portugal) en enero de 2020, ha sobresaltado al sector turístico de estos destinos por el grave efecto que puede tener en el volumen de plazas aéreas para el próximo año.
Para medir el impacto de estos cierres, la consultora de Inteligencia TurísticaMabrian Technologies, en colaboración con Interface Tourism Spain, ha cuantificado cómo podría afectar esta situación a cada uno de los destinos, a partir de los datos de Flightsats con la programación oficial de vuelos, actualizada a 1 de agosto.
Las Islas Canarias sería sin duda el destino más afectado por estos cierres, y en especial Tenerife, ya que entre el aeropuerto de Tenerife Sur y el de Las Palmas son más de 949.000 plazas las que se ponen en juego en el primer semestre de 2020. El aeropuerto de Faro, en el Algarve portugués, también sufriría una dura caída (360 mil plazas), mientras que el de Girona sería el aeropuerto menos afectado (99 mil plazas).
Si bien este efecto sobre la programación de asientos para 2020 resulta preocupante, todavía lo es mayor si comparamos estas plazas con las programadas en el primer semestre de 2019 por la compañía hacia estos destinos. En total, son 540 mil plazas las que Ryanair ha programado en la comparativa interanual (-27,8%).
Si se analiza la posible pérdida de plazas por mercados de origen, el mercado británico es el que resultaría más afectado, con más de 535 mil plazas, seguido del mercado español, con más de 253 mil plazas, y el mercado alemán con prácticamente 172 mil plazas.