Este dramático incidente, ocurrido este miércoles 25 de septiembre, reafirma la necesidad de colaborar en la zona de la Macaronesia para proteger a la enorme diversidad de cetáceos que habita en la región.
En la mañana de ayer, miércoles 25 de septiembre, ha tenido lugar otro varamiento masivo de cetáceos en la playa del Altar en Boavista, Cabo Verde. Al lugar ha acudido personal técnico de BIOS.CV, socio del Proyecto MARCET (Interreg-MAC, 2014-2020) “Red Macaronésica de Transferencia de Conocimientos y Tecnologías Interregional y Multidisciplinar para proteger, vigilar y monitorizar los cetáceos y el medio marino, y analizar y explotar de forma sostenible la actividad turística asociada”, que trabaja con el respaldo de Loro Parque Fundación.
A su llegada al lugar de los hechos, el equipo ha confirmado el varamiento masivo 136 delfines de cabeza de melón (Peponocephala electra) y, durante el día, se han alternado para atender el suceso más de 100 personas procedentes de la Delegación de Ministerio de Agricultura y Ambiente; la policía nacional; la Autoridad Marítima Portuaria; ONGs como Natura 2000, MarAlliance, Fundación Tartaruga, comunidad local de Norte y Bofareira, así como empresas turísticas y sus clientes (Naturalia, Baobab Tour, Boa Vista Carefy, etc.).
Con el operativo de rescate se intentó reintroducir el máximo de animales en el mar, sin embargo, a pesar de los esfuerzos realizados, el varamiento volvió a producirse. Ya por la tarde, alrededor de las 16:00 horas, y tras registrarse la muerte de tres ejemplares, se les tomaron muestras y medidas, según el “protocolo de atención a varamientos de cetáceos de la Macaronesia” desarrollado en el marco del proyecto MARCET, y se suspendieron las maniobras de rescate, dado el bajo éxito obtenido, reiterándose el varamiento a lo largo de la playa del Altar y de la contigua playa de Lancha.
En la mañana de hoy, a primera hora, han vuelto a desplazarse técnicos de BIOS.CV y de la Delegación de Ministerio de Agricultura y Ambiente para evaluar el estado de la situación actual, así como tomar datos y muestras de aquellos animales que hayan muerto durante la noche. Aunque todavía quedan algunos ejemplares vivos, finalmente acabarán muriendo.
Loro Parque ha querido destacar lo dramático de este incidente, que ha se ha repetido en varias ocasiones en el pasado y que evidencia la necesidad de colaborar en la zona de la Macaronesia para proteger a la enorme diversidad de cetáceos que habita en la región.
El Dr. Javier Almunia, director de Loro Parque Fundación, ha recordado que “desde hace años la Fundación viene invirtiendo en la creación de una red de conservación de cetáceos en la Macaronesia a través del proyecto SANICET”. Además, “ahora, gracias al apoyo de los fondos INTERREG, el programa MARCET está permitiendo la consolidación de esta red, que esperamos en el futuro sirva para preservar la enorme diversidad de especies de cetáceos en esta región del Atlántico”.