Efectivos de Bomberos de Tenerife intervinieron durante el fin de semana en cuatro incidentes en los que se vieron involucrados vehículos. La primera actuación destacada tuvo lugar en la noche del viernes, 19 de junio, y se trató de un choque de un automóvil en la carretera de El Portezuelo. Una dotación del Parque de La Laguna se encargó de limpiar la calzada de los restos del coche, eliminar un derrame de aceite y ayudar a la Guardia Civil asegurando la zona.

Durante el servicio, se contó con la colaboración de los voluntarios de Tegueste, quienes se quedaron en el lugar junto al conductor, que estaba en buen estado y fuera del automóvil, hasta la llegada de la grúa.

Junto a esta intervención, también bomberos de La Laguna colaboraron, junto a la Policía, en otros dos accidentes de tráfico. Uno de ellos, se produjo en la tarde del sábado con un turismo volcado en Valle Guerra y cuya ocupante, con heridas leves, recibió la atención del SUC. La dotación desplazada desconectó la batería y realizó una comprobación general del coche.

Por otra parte, en la madrugada de ayer domingo se realizó el saneamiento de un muro de un túnel del tranvía en la carretera La Cuesta-Taco, concretamente en la rotonda cercana al HUC. La protección quedó desplazada y con riesgo de caída a las vías por la colisión de un vehículo.

Asimismo, bomberos del Parque de San Miguel de Abona acabaron de extinguir, en la mañana del sábado, un incendio en un coche que se encontraba en una estación de servicio en Fasnia. Las llamas, que intentaron ser sofocadas por los trabajadores de la estación con extintores, se concentraron en el motor sin dejar daños personales. Una vez en la zona, se realizaron las labores de enfriamiento.

Rescate en el Puerto de Santa Cruz

Por otra parte, en la madrugada del sábado, efectivos del Parque de Santa Cruz participaron, junto a la Policía Portuaria y Guardia Civil, en el rescate de dos tripulantes, uno de ellos fallecido y el otro con heridas graves, que sufrieron un accidente laboral mientras llevaban a cabo tareas de carga y descarga en la bodega de un buque atracado, perteneciente a la compañía Transmediterránea.

El operativo, una vez recabó toda la información por parte del resto de fuerzas de seguridad y sanitarios, se puso en marcha observando que los operarios estaban atrapados a la altura de la cadera, entre la quinta rueda de la cabeza tractora y la parte baja de la plataforma utilizada para los trabajos. La liberación se acometió con una carretilla elevadora debido al elevado peso de la carga y las características del accidente.

En una maniobra combinada, se elevó la plataforma quitando el peso que soportaban los afectados, al igual que se desplazó hacia delante la cabeza tractora. Después de estos movimientos, se consiguió extraer al tripulante vivo, que estaba en un lateral con una pierna aprisionada, trasladándolo en un tablero espinal hasta la camilla y, a su vez, hasta la ambulancia medicalizada.

Finalmente, se rescató el cuerpo del fallecido quedando a disposición de la autoridad judicial y servicios fúnebres.

Los servicios fueron gestionados a través de la Central de Coordinación de Bomberos en el 1-1-2.