Agentes de la Guardia Civil, adscritos al Puesto Principal de Candelaria, sorprendieron recientemente a tres hombres que pescaban ilegalmente en la costa de Güímar.

Los pescadores se encontraban en una zona prohibida, sin las boyas reglamentarias de señalización y sin contar con las licencias necesarias para la actividad, lo que representaba un riesgo considerable.

Durante la intervención, los agentes incautaron un total de seis pulpos, con un peso superior a los ocho kilos, además de más de dos kilos de lapas de fondo, todo capturado de manera ilícita.

Los infractores fueron notificados con un total de nueve sanciones —tres para cada uno— de acuerdo con lo estipulado en la Ley 17/2003, de 10 de abril, de Pesca de Canarias. Las infracciones incluyen la falta de licencia de pesca, la ausencia de señalización adecuada y la práctica de la pesca en una zona prohibida.

Según la normativa vigente, las sanciones pueden variar en gravedad, con multas que van desde los 60 euros para infracciones leves, hasta los 300.000 euros para las consideradas muy graves.