El detenido había accedido a la tienda a través de una ventana del almacén.
La Policía Local de Granadilla de Abona detuvo el pasado fin de semana a F.J.M.L, de 39 años, por supuesto intento de robo en un establecimiento deportivo, en el núcleo de El Médano. El detenido fue sorprendido in fraganti cuando se encontraba dentro del local, al que había accedido por una ventana del almacén.
En la noche del 14 de noviembre, la Policía Local recibe un aviso informando de los hechos y de que las cámaras de vigilancia del negocio recogían la presencia, al menos, de una persona en su interior. La celeridad de los agentes, que se encontraban de servicio en el núcleo costero, permitieron coger al ladrón, justo cuando se encontraba detrás de la caja registradora y en posición de cuclillas.
El infractor, además de llevar puestas zapatillas deportivas sustraídas de la tienda, tenía una caja de cartón sobre la mesa del almacén, que contenía numerosos productos, tales como maleta de viaje, zapatos, riñoneras, mochila y demás materiales deportivos. El detenido tenía previsto volver a salir por la misma ventana por la que había accedido. Finalmente, todos los artículos que pretendía robar se quedan en el establecimiento.
Conducción temeraria
Agentes policiales detuvieron, también, recientemente, a L.G.F. como presunto autor de un delito contra la seguridad vial por conducir un vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas y conducción manifiestamente temeraria con peligro para la vida y la integridad física de las personas, atentado y desobediencia grave a los agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones. Los agentes que se encuentran realizando funciones de prevención de la delincuencia y atención ciudadana en el núcleo de San Isidro, observan que el supuesto infractor no respeta la prioridad de paso en una intersección, lo que que termina provocando una colisión con otro vehículo.
Tras los hechos, se emprende el seguimiento del vehículo por distintas calles del núcleo al huir a una velocidad superior a la permitida, por lo que se hace uso de la señal acústica y óptica por parte de los efectivos policiales. Finalmente, se termina con la detención del conductor, que muestra una actitud desafiante hacia los policías y que se encuentra bajo los efectos del alcohol.