La Dirección General de Tráfico (DGT), en colaboración con la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife, ha finalizado su campaña de control de consumo de alcohol y drogas al volante realizada entre el 19 y el 25 de agosto. Durante la semana de vigilancia, se llevaron a cabo 1.386 controles, arrojando un total de 22 positivos.
Los agentes realizaron 1.287 pruebas de alcoholemia, de las cuales 11 superaron la tasa permitida de 0,25 mg/l en aire espirado, lo que ha derivado en diligencias judiciales. Estos delitos pueden acarrear penas de hasta seis meses de prisión y la retirada del carné de conducir por hasta cuatro años. Asimismo, se notificaron dos delitos contra la Seguridad Vial relacionados con los controles efectuados.
En cuanto a las pruebas de drogas, se realizaron 99 controles, con 11 resultados positivos: seis por cocaína y cinco por cannabis.
La concejala de Seguridad Vial, Gladis de León, destacó la relevancia de estas campañas impulsadas por la DGT y la labor de la Policía Local durante todo el año para aumentar la seguridad en las calles y reducir los accidentes de tráfico y sus consecuencias.