En una reciente intervención, un agente de la Guardia Civil del Equipo Roca, de la compañía de Puerto de la Cruz, especializado en la prevención e investigación de robos en entornos agrícolas y ganaderos, demostró su compromiso con la seguridad incluso fuera de servicio.
El agente, quien se encontraba en su tiempo libre, sorprendió a un individuo en las inmediaciones de una finca agrícola en La Orotava, llevando consigo varias bolsas llenas de aguacates.
La actitud nerviosa y evasiva del hombre, quien intentaba abandonar el lugar a pie, levantó sospechas en el agente.
Decidido a esclarecer la situación, el guardia se identificó y procedió a entrevistarse con el sospechoso. La conversación no hizo más que aumentar las sospechas: el hombre cayó en contradicciones y finalmente confesó que acababa de sustraer los aguacates de una finca cercana, dedicada a este tipo de cultivo.
Tras verificar la situación, se confirmó que el hurto había tenido lugar apenas minutos antes de que el sospechoso fuera sorprendido por el agente.
Esta actuación pone de manifiesto, una vez más, el nivel de compromiso de la Guardia Civil, cuyos agentes no solo cumplen con su deber en horario laboral, sino que también demuestran una constante vocación de servicio en la lucha contra la delincuencia.