La historia militar de Tenerife continuará expuesta en la Plaza de Europa de Puerto de la Cruz. El Ayuntamiento ha renovado el acuerdo con el Museo Histórico Militar de Canarias para que los cañones de bronce “Duque de Alba” e “Hipomene” sigan siendo parte del paisaje de la ciudad. Estas dos piezas, que datan del siglo XVIII y están declaradas como Bien de Interés Cultural (BIC), son un símbolo del pasado defensivo de las Islas Canarias.
Fabricados en la época de la Corona Borbónica, los cañones eran parte de la estrategia para proteger la costa de Tenerife de posibles ataques. Más allá de su valor táctico, destacan por la calidad de su factura, con inscripciones y detalles ornamentales que reflejan el arte de la fundición militar de la época.
El acuerdo, firmado por el concejal de Patrimonio, Pedro Antonio Campos, y el director del Museo Histórico Militar, teniente coronel José Ramón Guillén González-Novo, garantiza no solo la conservación de las piezas, sino también su puesta en valor para el público.

Un deber moral con la historia
El alcalde de Puerto de la Cruz, Leopoldo Afonso, destacó la importancia de este compromiso. “Preservar nuestro patrimonio no es únicamente una obligación legal, es un deber moral con nuestra historia y con las generaciones futuras”, afirmó. Para el alcalde, los cañones son un recordatorio de la identidad cultural de la ciudad, “orgullosa de su legado”.
El concejal de Patrimonio, Pedro Antonio Campos, reiteró que la renovación del contrato es una muestra de la “apuesta de Puerto de la Cruz por proteger, conservar y difundir su patrimonio”. Añadió que no se trata solo de objetos históricos, sino de “símbolos que forman parte de nuestra memoria común y que, gracias a este acuerdo, seguirán estando al alcance de todos los ciudadanos y visitantes”.