El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Sebastián Franquis, ha expresado en el Pleno de la Cámara regional que las protestas programadas para el 20 de abril en las islas, que abogan por un cambio en el modelo turístico, representan una “tarjeta amarilla” para el Gobierno de Canarias. Franquis mostró su “respeto absoluto” por el derecho de los ciudadanos de las islas a manifestarse.

Franquis intervino en una pregunta del Grupo Socialista a la Presidencia del Gobierno sobre su valoración de las manifestaciones programadas para el 20 de abril. Según él, estas protestas no son contra el turismo, sino contra el modelo territorial y turístico del Gobierno actual. Criticó al Gobierno por evitar abordar uno de los temas centrales para el futuro inmediato del turismo en Canarias: la sostenibilidad.

Franquis argumentó que se trata de defender la sostenibilidad, proteger nuestras islas, cuidar nuestro territorio, vigilar nuestros espacios naturales, frenar el cambio climático e impulsar el desarrollo social. Criticó al presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, por su “cambio de opinión” para apoyar ahora las manifestaciones, cuando antes promovía los bajos salarios de los canarios como un atractivo para invertir en las islas, o cuando afirmaba que esta manifestación fomentaba la turismofobia.

Según Franquis, Clavijo “no tiene credibilidad”. Le instó a “ser creíble” y convocar el Consejo Asesor del Presidente junto a los sindicatos y el sector empresarial para acordar un aumento de salarios para los ciudadanos de Canarias. Franquis criticó a Clavijo por hablar demasiado en los medios de comunicación y no llevar a cabo estas medidas, ya que la redistribución de la riqueza se logra mejorando los salarios y con una política fiscal más justa, elementos clave en Canarias. Pero, según Franquis, Clavijo hace todo lo contrario.

El portavoz socialista señaló que el modelo territorial del Gobierno del Pacto de las Flores era claro y previsible. Defendió la tasa turística y argumentó que el mejor argumento para demostrar que no representa ninguna amenaza para los visitantes es que, a pesar del aumento de los precios de las camas alojativas, se siguen batiendo récords de visitas.

Franquis instó a Clavijo a utilizar la figura del Decreto Ley, como ha hecho con otros asuntos como “quitar impuestos a los más ricos”, para implementar la tasa turística en Canarias, que también contribuye a la redistribución de la riqueza en el Archipiélago. Tras la recuperación del turismo, Franquis sostiene que ahora es el momento de apostar por la sostenibilidad.

“Canarias no puede seguir sufriendo más tensiones en sus infraestructuras energéticas, en la congestión de tráfico, en la escasez de agua, en los vertidos residuales, en la falta de vigilancia de nuestros espacios naturales, porque todo eso pone en peligro nuestra principal actividad económica”, añadió Franquis.

Para Franquis, mientras todo esto ocurre, el Gobierno intenta evitar que se hable de qué pasa con el impacto en la sostenibilidad medioambiental, social e incluso económica, como una mejor redistribución de la riqueza, de la actividad, o con la implantación de la tasa turística y con los efectos devastadores de la quizá excesiva capacidad de carga en algunos territorios insulares. Según Franquis, estos son asuntos que no se están afrontando de frente.