Naím Yánez Alonso, consejero de VOX en el Cabildo de Tenerife, criticó la moción presentada el pasado viernes (28) en el Pleno por el PSOE, en la que solicitaban un “cordón sanitario” contra el partido de los patriotas y rechazaban cualquier acuerdo con fuerzas que consideran “extremistas”, vinculándolas con “posturas contrarias a valores democráticos como la igualdad, la libertad y el feminismo”.
Según Yánez, esta argumentación parte de una falacia de generalización apresurada, al asumir que cualquier partido que no comparta la agenda ideológica del PSOE es, por definición, contrario a la democracia. “Una vez más, el Partido Socialista refleja lo que entiende por democracia”, declaró.
El consejero, —quien también es segundo Teniente Alcalde en el municipio de Arona— recordó que 27.976 personas votaron por VOX en las pasadas elecciones del Cabildo Insular, y recordó que VOX fue el tercer partido más votado en las elecciones europeas, con 81.074 votos, por encima de otras formaciones políticas en Canarias.
“VOX alcanzó 3 millones 67 mil votos en las elecciones generales. Sin embargo, ustedes, recalcitrantes e insistentes, no logran entender el significado de la democracia y de la representación a través de las urnas recogida en nuestra Constitución, la misma que ustedes dilapidan cuando les apetece”, manifestó, refiriéndose a los socialistas.
“La pluralidad democrática no consiste en excluir a quienes piensan diferente”
El consejero también denunció lo que consideró una falacia del “hombre de paja” por parte del PSOE, al presentar a la llamada “extrema derecha” como un bloque monolítico que atenta contra los derechos humanos, sin pruebas concretas que demuestren que las políticas de VOX supongan una amenaza real para la democracia.
Yánez calificó este enfoque como una estrategia de deslegitimación política basada en etiquetas y no en argumentos racionales. “Este tipo de argumentación busca simplificar y distorsionar la realidad, atribuyendo a VOX una agenda autoritaria o antidemocrática sin analizar sus propuestas reales”, aseguró.
En su intervención, el consejero de VOX también destacó que las posturas defendidas por su partido, como la soberanía nacional, la igualdad ante la ley y la seguridad jurídica, son principios fundamentales en cualquier sistema democrático. “Se omite deliberadamente el hecho de que VOX defiende la soberanía nacional, la igualdad ante la ley y la seguridad jurídica”, subrayó. Además, señaló que la democracia implica la existencia de distintas visiones políticas, incluidas aquellas que discrepan del consenso ideológico de la izquierda, y que no se debe excluir a quienes piensan diferente.
Yánez también criticó que el PSOE no aplicara el mismo criterio a los partidos de extrema izquierda, algunos de los cuales, según él, han apoyado regímenes autoritarios o promovido la ocupación ilegal de viviendas, el ataque a la libertad de expresión o la justificación de la violencia política. “Esta doble vara de medir demuestra que la moción no responde a una defensa sincera de la democracia, sino a un intento de consolidar un monopolio ideológico en las instituciones”, argumentó.
“Control migratorio y la eliminación de leyes ideológicas”
Naím Yánez Alonso señaló que el documento socialista califica que la defensa de políticas migratorias más estrictas equivale a xenofobia o deshumanización de los migrantes, una tergiversación, según él, deliberada. “VOX no se opone a la inmigración en sí misma, sino a la inmigración ilegal y descontrolada, que genera problemas de seguridad y sostenibilidad para el Estado de bienestar. Exigir fronteras seguras y control migratorio es una postura legítima dentro del marco democrático y no tiene ninguna relación con regímenes totalitarios del pasado”, explicó Yánez, refiriéndose a la acusación de vinculación con el fascismo.
En este sentido, destacó que “equiparar esta posición con el fascismo es una maniobra de propaganda que ignora el hecho de que países democráticos de todo el mundo, incluyendo Estados Unidos y muchas naciones europeas, han endurecido sus políticas migratorias sin que ello los convierta en estados autoritarios”.
Sobre el modelo autonómico, el consejero criticó que la moción socialista sugiriera que cualquier crítica o propuesta de recentralización del Estado sería un ataque a la democracia. “Esta afirmación es profundamente errónea”, dijo Yánez.
“El Estado de las Autonomías es un modelo organizativo que puede y debe ser objeto de debate, especialmente cuando su funcionamiento ha derivado en ineficiencias, desigualdades entre españoles y concesiones a nacionalismos separatistas que buscan fracturar la nación. La defensa de una mayor cohesión territorial y la recuperación de competencias por parte del Estado no es un planteamiento antidemocrático, sino una opción política tan legítima como la descentralización”, añadió, mencionando que países con una administración centralizada como Francia o Portugal son ejemplos de democracias plenas y funcionales.
“Los impuestos ‘verdes’ que encarecen la vida de los ciudadanos”
En cuanto a las políticas climáticas, Naím Yánez rechazó que VOX fuera vinculado al “negacionismo” o a una oposición a la protección del medio ambiente. “VOX no niega la existencia de que el clima cambie, sino que cuestiona las políticas basadas en alarmismo ideológico y en la imposición de medidas que perjudican a la economía y a las familias trabajadoras sin ofrecer soluciones efectivas. Rechazar impuestos ‘verdes’ que encarecen la vida de los ciudadanos o defender una transición energética más racional y menos ideologizada no es negacionismo, sino sentido común”, argumentó.
“Demonizar a VOX y excluirlo del debate público”
“Además, se menciona el supuesto peligro de los «pseudomedios» que difunden bulos al estilo «nazi», lo cual no solo es una afirmación sin pruebas, sino que también cae en una falacia, atacando a ciertos medios en lugar de debatir sus contenidos con hechos contrastables”, agregó.
“El Partido Socialista insinúa que toda crítica a sus políticas es producto de desinformación, sin considerar la posibilidad de que existan argumentos legítimos en contra de sus propuestas. Este intento de desacreditar fuentes de información alternativas sin presentar evidencias concretas es, en sí mismo, una forma de manipulación mediática”, afirmó Yánez.
El consejero de VOX también destacó que la referencia a la desinformación “al estilo nazi” es una falacia de reducción al nazismo, una táctica recurrente que busca asociar cualquier disidencia política con el totalitarismo, sin establecer una relación lógica entre los hechos actuales y los regímenes del pasado.
“Este tipo de comparación no solo es históricamente deshonesta, sino que trivializa los crímenes reales del nazismo, utilizándolos como un mero recurso retórico para desacreditar a la oposición”, añadió.
Por otro lado, Yánez cuestionó que se sugiriera que VOX busca “deshumanizar” a ciertos colectivos, lo que, según él, es otra “falacia del hombre de paja”.
“VOX defiende políticas de control migratorio y la eliminación de leyes ideológicas que privilegian a ciertos sectores sobre otros, pero en ningún caso promueve la ‘deshumanización’ de nadie. La moción no aporta ninguna prueba de que VOX haya impulsado medidas que atenten contra la dignidad de los inmigrantes, las mujeres o cualquier otro grupo social”, y agregó que, en lugar de fomentar un debate racional “el documento socialista recurre a una falacia de apelación a la emoción, intentando generar un rechazo visceral”.
En su intervención, el consejero afirmó que la moción socialista busca crear una falsa asociación entre posturas políticas legítimas y regímenes totalitarios con el objetivo de demonizar a VOX y excluirlo del debate público. “Esta estrategia no solo es intelectualmente deshonesta, sino que también es peligrosa para la propia democracia, pues pretende excluir del debate a una parte significativa de la sociedad que apoya estas políticas”, añadió.
Para Alonso “la democracia no consiste en eliminar a los adversarios políticos mediante etiquetas, sino en debatir con argumentos”, afirmó.
El resultado fue el retiro de la moción por parte de los socialistas tras las modificaciones propuestas por Coalición Canaria (CC) y el Partido Popular (PP), quienes introdujeron enmiendas.