Para el grupo parlamentario VOX, “hay claros culpables” del alto costo de la vivienda en las islas, y son “los sucesivos gobiernos que han convertido a Canarias en un páramo de falta de oportunidades para nuestros compatriotas y un aumento de dificultades para acceder a una vivienda para las clases medias y trabajadoras”, así lo afirmó este lunes su portavoz, Nicasio Galván. Por lo que, ante esta situación, ha anunciado la presentación de una nueva Proposición No de Ley para el próximo pleno.
Entre las propuestas principales, el partido busca establecer una bonificación del 100% en el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD) y el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) para los casos contemplados en la línea de avales que ha presentado el Gobierno de España. Además, proponen reducir el tipo general del AJD, del 0,75% al 0,15%, como medida para incentivar la compraventa de inmuebles, dinamizar el mercado inmobiliario y contribuir a reducir los precios de las viviendas.
Dentro de la misma iniciativa, VOX también solicitará una bonificación del 100% en el ITP para la compra de vivienda habitual cuyo valor no exceda los 300.000 euros, orientada especialmente a familias numerosas y personas con discapacidad.
La formación política subraya la grave situación que atraviesan los jóvenes canarios, quienes, según VOX, deben destinar el 99,4% de su salario para cubrir los costes de alquiler, una cifra considerablemente superior a la media nacional, que se sitúa en torno al 80%.
En materia de compra, según el índice de precios trimestral de Idealista, en el último año, el valor del metro cuadrado en Canarias ha aumentado un 15,9%, alcanzando los 2.432 euros. Por provincias, en Las Palmas el precio ha subido un 10,3%, situándose en 2.278 euros/m², mientras que en Santa Cruz de Tenerife el incremento ha sido del 20,2%, alcanzando los 2.555 euros/m².
Respecto a las medidas anunciadas por el Gobierno para paliar esta problemática, VOX las considera “insuficientes y un parche de problemas estructurales”, criticando que su complicado condicionado “hace imposible que los españoles reciban estas ayudas”, las cuales, en palabras de Galván, “se quedan en su mayoría en tinta de periódicos y clics en digitales”.
