Las monedas intervenidas, que se encontraban en muy buen estado de conservación, podrían haber alcanzado en el mercado negro un valor de 200.000 euros.
Fue una numismática de Londres la que informó a los agentes de que un individuo había ofrecido una moneda áureo y que ésta procedía de un robo cometido en el año 2012 en Suiza.
Agentes de la Policía Nacional han recuperado en Barcelona tres monedas áureos del Imperio Romano de gran valor histórico y económico, y han detenido a dos individuos cuando intentaban vender una de ellas. Las monedas intervenidas, que se encontraban en muy buen estado de conservación, podrían haber alcanzado en el mercado negro un valor de 200.000 euros.
La investigación se inició cuando una numismática de Londres comunicó a los agentes que un individuo había ofrecido una moneda áureo del Imperio Romano a otra numismática londinense y que, además, este individuo había informado de que disponía de alguna otra pieza. Asimismo, advirtieron a los investigadores de que ésta formaba parte de un conjunto de ocho monedas que habían sido robadas en el año 2012 en un tren que hacía ruta entre dos ciudades suizas, si bien cuatro de ellas fueron recuperadas por la policía de aquel país a finales del año 2020.
Tras varias gestiones policiales, los agentes identificaron a la persona que estaba ofreciendo la moneda para su venta, resultando ser un ciudadano de origen argelino afincado en Barcelona.
Las monedas recuperadas podrían alcanzar un valor de 200.000 euros
A finales del pasado mes de marzo, los agentes tuvieron conocimiento de la presencia del investigado en Barcelona y establecieron un dispositivo policial en el interior y en los alrededores del lugar. Allí arrestaron a dos individuos, ambos de origen argelino; uno de ellos portaba la moneda en cuestión y, el otro, le acompañaba para hacer las veces de intérprete. Además, el principal detenido accedió a entregar las otras dos monedas que faltaban por recuperar y que tenía guardadas en su domicilio.
Según los expertos, las monedas recuperadas -que se encontraban en muy buen estado de conservación- podrían haber alcanzado en el mercado negro un valor aproximado de 30.000, 50.000 y 120.000 euros, sumando un total de 200.000 euros. Por otra parte, la investigación continúa abierta al objeto de esclarecer el robo ocurrido en Suiza.