El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ofreció el reporte provisional de los accidentes ocurridos en las carreteras españolas el año pasado.
Se contabilizaron 1.048 accidentes mortales, cobrando la vida de 1.145 personas, tres menos que en 2022.
Además, 4.495 individuos resultaron heridos, requiriendo atención hospitalaria.
El balance anual se presentó en la sede madrileña de la Dirección General de Tráfico (DGT). Acompañaron al ministro del Interior la subsecretaria del departamento, Susana Crisóstomo, y el director general de Tráfico, Pere Navarro.
Las estadísticas compartidas hoy se contextualizan en un escenario donde los viajes de larga distancia aumentaron un 2 por ciento, al igual que el número de vehículos en circulación (un 1,7 por ciento) y el registro de conductores (un 0,4).
En 2023, se contabilizaron 448,7 millones de desplazamientos por carretera, con un parque vehicular de 36,6 millones y una cifra de conductores que alcanzó los 27,8 millones.
En la presentación del balance, Grande-Marlaska enfatizó: “En repetidas ocasiones he mencionado que la mayoría de los accidentes de tráfico son evitables. Reducir esas trágicas cifras está en nuestras manos si todos colaboramos con ese objetivo”.
Hizo hincapié en la responsabilidad de los conductores: “Evitar distracciones, respetar las normas viales y utilizar sistemas de seguridad son tres acciones simples que pueden reducir significativamente estas dramáticas estadísticas y las tragedias humanas que las acompañan”.