Es la mayor cifra de sustancias estupefacientes decomisadas desde 2011 y triplica la cantidad de 2019, según el informe elaborado por el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) del Ministerio del Interior.
El Servicio de Vigilancia Aduanera, Policía Nacional y Guardia Civil llevaron a cabo dieciocho operaciones en alta mar, once de ellas con resultado positivo.
Desde 2011 hasta 2020, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Vigilancia Aduanera realizaron 129 abordajes en aguas internacionales que permitieron la incautación de 386 toneladas de drogas.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria intervinieron durante 2020 más de 69 toneladas de sustancias estupefacientes en dieciocho abordajes a embarcaciones en aguas internacionales, en concreto en las zonas del Atlántico Norte y del Mediterráneo. En total se aprehendieron 63,6 toneladas de hachís y 5,4 toneladas de cocaína.
Constituye la mayor cantidad de droga decomisada en este tipo de operaciones desde 2011 y triplica la intervenida a lo largo del año 2019. En el cómputo global, desde 2011 hasta 2020, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, dependiente del Ministerio de Hacienda, realizaron 129 abordajes en aguas internacionales que permitieron la incautación de 386 toneladas de drogas.
Los datos forman parte del balance del año 2020 elaborado por el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) del Ministerio del Interior sobre abordajes en aguas internacionales. Estas operaciones están contempladas en las convenciones de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, de 1982, y contra el Tráfico Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Psicotrópicas, de 1988, ambas ratificadas por España.
En 2020, España tramitó veintisiete solicitudes de abordaje, de las cuales se realizaron dieciocho, once con resultado positivo y siete sin detección de sustancias prohibidas. Otras nueve peticiones no culminaron en alta mar por distintas causas.
La legislación internacional obliga a requerir autorización para los abordajes a los países bajo cuyo pabellón navegan las embarcaciones intervenidas. De las investigadas, en su mayoría veleros, ocho navegaban bajo pabellón de Países Bajos. Le siguen por número Reino Unido, Alemania y Bélgica, con tres embarcaciones en cada caso, y Togo y Panamá, con dos cada una.
