El apagón total que dejó sin suministro de energía eléctrica a España y otros países de la comunidad europea el pasado 28 de abril ha generado importantes perjuicios económicos y personales. En opinión de Marín & Mateo Abogados, “no es el momento de buscar culpables ni de especular sobre las causas técnicas del apagón, sino de actuar para resarcirse de los daños sufridos”.
En los casos de empresas los daños llegan a ser, excepciones aparte, más graves que en los particulares. Sin embargo, “no podemos mirar a otro lado y decir que gracias a Dios no ha pasado nada grave, pues podríamos estar aún sin suministro y entonces veríamos situaciones dramáticas”, apuntan desde el despacho de abogados.
¿Quién es responsable?
Abel Marín, abogado y socio de Marín & Mateo Abogados, explica que la responsabilidad jurídica derivada del cese del suministro no depende de ser ingeniero eléctrico ni de comprender los pormenores técnicos del sistema: “Nosotros, como juristas, nos limitamos a analizar la consecuencia jurídica básica: cuando un servicio esencial como el suministro eléctrico se interrumpe, estamos ante un incumplimiento contractual, y quienes han sufrido daños tienen derecho a reclamar su indemnización”.
Actuar ahora para no perder derechos
El despacho recomienda a todos los afectados —tanto particulares como empresas— reclamar de inmediato a su compañía suministradora de energía y dar parte a su aseguradora en los términos que establezcan sus contratos.
Según Abel Marín, “cada reclamación debe dejar constancia por escrito de los daños materiales, pérdidas económicas o perjuicios sufridos, adjuntando facturas, informes técnicos, fotografías u otros medios de prueba”.
Desde Marín & Mateo Abogados subrayan que, aunque políticamente se intente calificar el apagón como “inevitable” o “imprevisible”, ello no extingue automáticamente el derecho de los afectados a exigir una reparación. “Tampoco los responsables políticos de los Ministerios tienen capacitación técnica para diagnosticar las causas del apagón, y, sin embargo, asumen decisiones. De igual forma, nosotros, como abogados, opinamos sobre el deber de resarcir los daños, que es evidente”, afirma Marín.
Un apagón no puede dejar sin protección a los ciudadanos
El despacho recuerda que el cese de la prestación de un servicio esencial, como la energía eléctrica, activa mecanismos de responsabilidad jurídica que protegen a los usuarios, independientemente de las explicaciones técnicas que se ofrezcan posteriormente.
“La clave está en reclamar ahora, de forma ordenada, documentada y dentro de los plazos legales”, concluyen desde Marín & Mateo Abogados. “Es preferible actuar de inmediato que lamentarse cuando ya sea tarde para hacerlo”.