El mercado inmobiliario en España continúa mostrando dinamismo, con el mayor número de compraventas de viviendas desde 2007, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE). Sin embargo, la inversión en alquiler residencial está experimentando una caída. Iñaki Unsain, Personal Shopper Inmobiliario (PSI) de referencia, atribuye esta situación a las restricciones relacionadas con la regulación de precios de los alquileres, con una disminución estimada de hasta el 50% en algunos casos.
“Muchas promotoras de obra nueva y fondos han decidido parar sus inversiones built to rent en las ciudades donde se aplica la regulación de precios del alquiler, ya que la rentabilidad de estos proyectos cae de forma muy importante y están dirigiendo sus inversiones a plazas donde no exista regulación de precios”, señala Unsain. El experto indica que esta redirección de inversiones está provocando una reducción en la oferta de viviendas en alquiler.
Por este motivo, Unsain opina que las políticas de vivienda del Gobierno han creado un “clima de inseguridad” que ha ahuyentado a muchos inversores, lo que ha resultado en una caída considerable de la oferta y un consecuente aumento de los precios.
A pesar de esto, la demanda en Barcelona se mantiene alta. Según datos del Observatorio del Alquiler de la Fundación Alquiler Seguro y la Universidad Rey Juan Carlos, una vivienda en la ciudad puede recibir más de 2.700 solicitudes de visita en diez días. Esto ha posicionado a Barcelona como la ciudad con el precio por metro cuadrado más elevado de Cataluña, alcanzando los 22,4 €/m².
Perspectivas para 2025
En un entorno marcado por la incertidumbre, muchos pequeños inversores y propietarios están optando por el alquiler temporal, ya que este segmento no tiene precios regulados y ofrece una rentabilidad más atractiva.
Unsain destaca que el sector inmobiliario aún muestra fortalezas, como los bajos tipos de interés y la alta demanda de servicios por parte de los PSI, lo que podría mantener un volumen considerable de compraventas en los próximos años. “En 2024 hemos visto un volumen elevado de compras y creemos que esta tendencia se mantendrá en 2025, aunque dependerá de la evolución de las políticas regulatorias y de la capacidad del mercado para generar confianza entre los inversores”, concluye.