El vicepresidente y consejero de Economía, Industria, Comercio y Autónomos del Gobierno de Canarias, Manuel Domínguez, ha expresado su preocupación por la intención del Gobierno de España de limitar las ayudas a la inversión para las empresas canarias, conocidas como Incentivos Regionales. Según Domínguez, el Ministerio de Hacienda ha decidido fijar las subvenciones a proyectos canarios en un 50% en la modificación del Decreto 169/2008, a pesar de que Europa permite hasta un 80%.
En febrero pasado, Domínguez envió una carta a la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para manifestar la preocupación del Gobierno de Canarias por el impacto de esta limitación en el desarrollo económico de las empresas de las islas. “Y no hemos recibido respuesta, a pesar de los múltiples intentos de ponernos en contacto con la señora Montero”, afirmó Domínguez. “Si el Gobierno Central aprueba la modificación de este decreto, no solo volverá a permitir un nuevo desequilibrio territorial en España, sino que desoirá las indicaciones de Europa para que las empresas isleñas puedan crecer”.
Los incentivos regionales para Canarias estaban fijados en un 70%, 60% y 50%, dependiendo del tamaño de las empresas (pequeñas, medianas o grandes). En diciembre de 2023, la Comisión Europea aumentó en diez puntos porcentuales este mapa de ayudas regionales para el periodo comprendido entre el 1 de enero de 2024 y el 31 de diciembre de 2027, llegando hasta un 80% para pequeñas empresas.
La aplicación de este aumento depende del Gobierno central, que hasta el momento, según afirmó el vicepresidente, no solo ha ignorado las indicaciones de la Comisión, sino que en la modificación del Real Decreto 169/2008 ha limitado estas ayudas al 50%.
Domínguez subraya la necesidad de que el Gobierno de España comprenda que la limitación de estas ayudas para las empresas de las islas “supondrá un agravio comparativo con el resto de regiones”.
Los incentivos regionales son ayudas financieras concedidas por la Administración General del Estado a la inversión productiva para fomentar la actividad empresarial, orientando su localización hacia zonas previamente determinadas.
El objetivo de estas ayudas es contribuir al equilibrio económico interterritorial y al crecimiento económico y sostenible mediante la financiación de proyectos de inversión productiva, generadores de empleo, tecnológicamente avanzados y medioambientalmente sostenibles.
Estas ayudas fomentan la actividad económica en las regiones con un menor nivel de desarrollo y contribuyen a cerrar la brecha en términos de renta per cápita con el resto de las regiones, no solo de España sino también de la UE. “De ahí, la importancia de estas ayudas para las empresas de la Comunidad Autónoma de Canarias, en su mayoría pymes, y con una carga extra al estar alejadas del territorio peninsular”, argumentó Domínguez.
Estas ayudas, complementadas con los incentivos canarios recientemente aprobados por el Gobierno canario, “colocarían a las empresas de la región en igualdad de condiciones con las del resto del territorio peninsular. Su limitación pondrá en riesgo el crecimiento y la competitividad de nuestro tejido productivo”, lamentó Domínguez.