El Círculo de Empresarios y Profesionales del Sur de Tenerife (CEST) ha emitido un llamado urgente para abordar la sobrecarga de los juzgados en el sur de Tenerife, con especial atención al juzgado de Granadilla de Abona. Según la organización, este juzgado se ve abrumado por un número “desproporcionado” de casos, que supera la capacidad de su personal y sus instalaciones obsoletas.
Los representantes legales del CEST describen una situación en la que los juzgados están inundados de casos, lo que lleva a un personal agobiado que sufre problemas físicos y mentales debido a la presión de su trabajo. Dejando claro que esto “no favorece el correcto clima laboral”.
El presidente del CEST, Javier Cabrera, señala que esta situación ha persistido durante años, provocando indignación entre los ciudadanos y los profesionales del derecho, quienes demandan medidas urgentes para solucionarla. “El estrés laboral y el ambiente general que se ha tolerado en Granadilla ha generado unas consecuencias que sufrimos actualmente”, asevera.
Por ello, la organización insta a la implementación de “medidas específicas” para abordar la situación actual, como la asignación de un nuevo edificio que refleje la realidad del sur y de este partido judicial, la creación del juzgado número cinco, la especialización de los juzgados y el fomento de la mediación.
Los miembros de la asociación vinculados al sector judicial describen una “realidad abrumadora” en los juzgados de Granadilla de Abona, donde el número de casos pendientes ha aumentado exponencialmente en los últimos años, superando la capacidad de los funcionarios judiciales para atenderlos de manera eficiente. Esta situación se ve agravada por la “falta de recursos humanos y materiales”, lo que según explican, genera un ciclo de ineficiencia y retrasos.
El Círculo advierte que la lentitud de los procedimientos judiciales tiene un impacto directo en la vida de los ciudadanos, obligándolos a esperar meses o incluso años para obtener una resolución, generando incertidumbre, ansiedad y frustración. Además, detallan que, el retraso en la justicia puede tener graves consecuencias económicas, ya que impide que las personas puedan acceder a sus derechos o defender sus intereses de manera oportuna.
Varios profesionales del derecho han expresado su descontento a la Junta Directiva. Los abogados y procuradores que ejercen en Granadilla de Abona también se ven afectados por la situación de colapso judicial. La acumulación de casos y los retrasos en los trámites dificultan su trabajo y les impiden ofrecer un servicio de calidad a sus clientes.
Especifican que “hasta ahora, lo único que se ha hecho por parte de las instituciones es fomentar una imagen de Granadilla que genera un clima que no es propicio para el alto rendimiento que se exige y agota a los servidores públicos que diariamente ofrecen su mejor versión a cualquier persona que lo necesita”.
Ante la urgencia de abordar el colapso judicial, el CEST ha identificado cuatro medidas esenciales para garantizar un acceso rápido y eficiente a la justicia: incrementar el personal y los recursos materiales en los juzgados, implementar sistemas informáticos más eficientes, agilizar los trámites procesales y crear nuevos juzgados.
Javier Cabrera, presidente del CEST, hace un llamado a la acción: “Es hora de actuar para que la justicia en Granadilla de Abona deje de ser un símbolo del colapso y se convierta en garante de los derechos y libertades de los ciudadanos. La celeridad, la eficiencia y la transparencia son principios fundamentales de un Estado de Derecho, y deben ser defendidos con firmeza”.
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