El concejal responsable de la Agencia de Empleo y Desarrollo Local, Eduardo Dávila, visitó el pasado viernes el edificio municipal de Los Andes, situado en Barranco Las Lajas, para participar en la clausura de la segunda edición del curso «Cosiendo Oportunidades en Tacoronte», que ofreció 200 horas de formación gratuita a cargo de la empresa de inserción laboral Hiebra Social.
Este proyecto, orientado a mejorar la cualificación de personas desempleadas del municipio, ha permitido fortalecer las habilidades básicas en costura y técnicas de upcycling de las participantes. Además, el programa abordó temas como la sensibilización ambiental y la búsqueda activa de empleo.
Desde el 12 de mayo, se impartieron clases teórico-prácticas combinadas con talleres sobre consumo responsable, reutilización, reciclaje, y se brindó asesoramiento en recursos para empleo y formación.
Durante el acto de clausura, Dávila y Lupe Martín, gerente de Hiebra Social, entregaron los diplomas y felicitaron a todo el alumnado por su esfuerzo en esta segunda edición centrada en la moda y la costura.
Debido a los buenos resultados obtenidos y el interés manifestado por los participantes y el equipo docente, la Agencia de Empleo y Desarrollo Local contempla convocar una tercera edición del programa, de nivel intermedio, que permitirá continuar profundizando en el patronaje y la confección de prendas, dando así continuidad a los conocimientos adquiridos en esta primera fase.
El programa Cosiendo Oportunidades en Tacoronte forma parte de la estrategia del departamento dirigido por Eduardo Dávila para capacitar y combatir el desempleo. El concejal, quien también está al frente de las áreas de Voluntariado y Residuos Sólidos, visitó personalmente la segunda edición del proyecto para conocer de primera mano la valoración de las mujeres participantes y observar la colección de prendas que ellas mismas han confeccionado a lo largo del curso.
“Los frutos obtenidos revelan que este programa resulta clave para el fomento de nuestra economía circular, ya que permite la reducción de residuos textiles en un espacio de aprendizaje en materia de reutilización, extendiendo la vida útil de ropa y complementos que ya no usamos y evitando con ello el consumo sobredimensionado”, explicó Dávila.
Durante el encuentro se destacó también la importancia del trabajo en grupo y la red de apoyo creada entre las inscritas y el profesorado, que ha servido como “un punto de encuentro colaborativo en el que se ha estimulado la creatividad y el talento, con simulaciones de casos reales y situaciones para el enriquecimiento personal de todas las inscritas”.
El concejal recordó que este tipo de formación puede derivar en oportunidades de autoempleo, emprendimiento o incluso inserción laboral en talleres y tiendas, lo que demuestra su efectividad para combatir el desempleo que afecta a la ciudad, especialmente entre las mujeres.