Los sindicalistas de Base de Canarias (SBC), en representación de la mayoría de las Camareras de Pisos del Hotel Guayarmina Princess, han anunciado una huelga para los días 29 y 30 de marzo, coincidiendo con el Viernes y Sábado Santo, cumpliendo así con el mandato del comité.
La acción se lleva a cabo para exigir a la empresa el “cumplimiento expreso del artículo 38 del vigente Convenio de Hostelería”, que implica la firma de un acuerdo que regule y limite su trabajo diario, protegiendo así su seguridad y salud laboral.
Las camareras de pisos, un colectivo que, según los datos y estadísticas, termina su relación laboral con una invalidez total para su profesión después de soportar una carga de trabajo inasumible, han dicho “basta ya”. Exigen que se les respete a ellas y a su Comité de empresa, que lleva seis años pidiendo a la compañía que realice las “evaluaciones de ergonomía, carga física y riesgo psicosocial” requeridas por el Convenio de Hostelería.
Según SBC, la “falta de empatía” de las empresas con sus camareras de pisos, la “sumisión” de los servicios de prevención a las empresas que les pagan y la “inacción” de la Inspección de Trabajo han llevado a un índice de absentismo en Canarias en el colectivo de Camareras de Pisos del 30%, y con un 90% de las causas derivadas de trastornos musculoesqueléticos y dorsolumbares y relacionadas con la salud mental.
Adelantan que, “evidentemente” a la huelga de las Camareras de Pisos del Hotel Guayarmina Princess esta Semana Santa se sumarán nuevas convocatorias de huelga de dicho colectivo en otros hoteles.
La falta de personal generalizado en el sector ha trasladado ”el miedo” a las empresas en perder a sus Camareras de Pisos, mientras el colectivo lucha por unas “condiciones de trabajo dignas”.
Las Camareras de Pisos del Hotel en cuestión y su Comité de empresa se concentrarán desde primera hora el viernes y sábado a las puertas de su hotel y esperan un “seguimiento masivo de la convocatoria de huelga”. Esta acción es un claro mensaje: si las condiciones no se cumplen en el Guayarmina Princess, “hay sin duda otros hoteles esperando por ellas”. Concluyen.