Responsabiliza directamente a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.
La Plataforma Pro Hospital Público para el Sur y Suroeste de Tenerife manifiesta su profundo malestar por la situación suscitada en el proceso de construcción del módulo quirúrgico del futuro Hospital Público de Sur y Suroeste de Tenerife, obra que fue adjudicada a la empresa Sacyr el pasado mes de julio después de un proceso de adjudicación de diez meses.
Hay que recordar que desde que se sacó a concurso la obra en junio de 2015, y posterior cierre del plazo para la presentación de ofertas en agosto de 2015, el Servicio Canario de Salud tardó en adjudicarla 10 meses. Según estos manifestaron a la Plataforma en su momento, por el hecho de que estaban revisando muy rigurosamente todas las propuestas para evitar sorpresas y paralizaciones futuras, algo que, según el colectivo, lamentablemente ha terminado sucediendo.
Desde la Plataforma se piensa que la empresa adjudicataria no es la única responsable de lo sucedido, ya que consideran que hay una gran responsabilidad en la propia administración, concretamente en el Servicio Canario de Salud, y la propia Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, donde, según el colectivo, sus técnicos y los componentes de la mesa de contratación, han incurrido en graves irresponsabilidades, por no realizar un trabajo riguroso en el proceso de estudio y adjudicación, por lo que exigen una investigación para aclarar lo sucedido y que se delimiten responsabilidades, sancionando de alguna manera a los responsables directos, máxime cuando en los últimos meses, numerosos procesos de adjudicación de esta consejería, se han visto también envueltos en incomprensibles errores que han tenido como consecuencia el grave retraso en la puesta en funcionamiento de servicios vitales para los ciudadanos.
Desde la Plataforma se considera inaceptable que después de casi un año de estudio de las diferentes ofertas presentadas en el concurso, los técnicos de la Consejería de Sanidad y los miembros de la mesa de contratación no hayan sabido detectar la baja temeraria realizada por Sacyr, que, según la Plataforma, fue tanto desde el punto de vista económico como sobre el tiempo de ejecución de la obra. Dichas bajas tenían como mínimo, que haberse justificado adecuadamente, pero una vez conocidos por la Plataforma los términos de esta justificación, piensan que fueron una tomadora de pelo, y que jamás se tenían que haber aceptado.
Por ello desde el colectivo se responsabiliza también al director del Servicio Canario de Saludo, Roberto Moreno, y al propio consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, Jesús Morera, ya que, aseguran, desde las primeras reuniones que mantuvieron con ellos, se les advirtió de una serie de circunstancias, donde la Plataforma pidió máxima rigurosidad y prudencia en el proceso, precisamente para evitar lo que ha sucedido. En este sentido el colectivo piensa que los máximos responsables de la Consejería de Sanidad, no sólo no tomaron en suficiente consideración las peticiones de la Plataforma, sino que además no hicieron un adecuado seguimiento del comienzo de las obras, pues tuvo que ser la propia Plataforma la que, en un correo enviado al consejero el 13 de octubre pasado, le advirtiera de que algo estaba pasando, ya que desde la adjudicación en julio hasta el día en que se le advierte de la situación, varios meses después, no se había movido una piedra. Fue a partir de ese momento cuando el consejero solicitó una reunión urgente con la contrata a raíz de la cual se conoció que la empresa adjudicataria tenía intención de pedir un aumento del presupuesto.
La Plataforma recuerda que han pasado ya casi 2 años desde la publicación del concurso y su dilatado proceso de adjudicación, un tiempo vital perdido para los ciudadanos del Sur de Tenerife, cuyos únicos responsables son Brígida Mendoza y Jesús Morera, anterior y actual Consejeros de Sanidad.
Desde la Plataforma se exige ahora máxima diligencia para que, o bien se rescinda el contrato a Sacyr, con la consiguiente penalización económica, o se le obligue al comienzo inmediato de las obras y a recuperar el tiempo perdido, además de hacer una supervisión continua y seria de la obra.
En cuanto a la última propuesta que, al parecer, ha realizado la empresa adjudicataria de cambiar algunos de los materiales por otros más económicos, desde el colectivo son tajantes “No se debe aceptar nunca una merma en la calidad de la obra”
Desde la Plataforma se lamentan, además, de que este sea el enésimo episodio negativo sufrido en el tan ansiado proyecto de hospital público para la zona. Según aseguran “es una vergüenza que después de 20 años de una lucha justa del colectivo, hoy, el Sur de Tenerife no cuente aún con este hospital” y responsabilizan de ello a los diferentes gobiernos, compuestos por Coalición Canaria, Partido Popular y ahora también PSOE, quienes pareciera que realmente estuvieran mirando más por los intereses de la sanidad privada, que por los generales de sus ciudadanos, ya que aseguran, si realmente no ha sido así, se hace muy difícil aceptar tal nivel de incompetencia y mala gestión mostrados gratuitamente en todos estos años, en una materia tan sensible como es la sanidad.
Por ello desde el colectivo se pide también a los alcaldes de la zona que eleven la intensidad de acciones y declaraciones institucionales, pues creen intolerable lo que está sucediendo, y aseguran que seguirán denunciando y criticando cualquier obstáculo que suponga un retraso o disminución de la calidad de las obras, y advierten a los máximos responsables, encabezados por el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, que no dudarán en retomar las movilizaciones populares o cualquier otra acción que consideraran oportuna, si a lo largo del 2018 el hospital no estuviera terminado y en funcionamiento.