En julio se espera que vuelva a operar la línea que unía hasta 2012 los municipios de San Sebastián, Playa de Santiago y Valle Gran Rey por mar.
Curbelo: “Estamos ante el resultado satisfactorio de una reivindicación de los ciudadanos de la Isla”
En realidad este trayecto se cubrió desde 1986 a través de distintas opciones y embarcaciones.
Un vecino recuerda que era tan económico que usaban la línea para almorzar fuera del municipio en un día de fiesta o para hacer compras en la Villa.
El impulso a la actividad turística de Valle Gran Rey y Playa de Santiago se prevé que sea inmediato y permita estancias más largas para los visitantes.
Queda ya muy poco tiempo para que San Sebastián, Playa de Santiago y Valle Gran Rey vuelvan a estar unidos a través de una línea marítima. Entonces se habrá dado una vuelta más en el especial nudo que existe entre la Isla y el mar. Una relación muy estrecha que a veces no es comprendida desde el exterior. Muchos en la Isla siguen denominando a las embarcaciones que a lo largo del tiempo han realizado este trayecto como Barracuda, nombre de la primera nave que cubrió el servicio
El pasado miércoles, 28 de junio, el nuevo catamarán Benchi Express fue botado desde los astilleros de Barcelona y ya emprende el camino a la Isla en la que operará uniendo los municipios del Sur. El inicio no se alargará más allá del próximo mes de julio, fechas en las que la llegada de visitantes se incrementa de forma notable.
El presidente del Cabildo, Casimiro Curbelo Curbelo, considera que estamos ante el resultado “satisfactorio de una reivindicación de los ciudadanos de La Gomera”, expresada en múltiples ocasiones desde que se suspendió la línea y que ha recibido el respaldo de todas las instituciones e instancias. Especialmente, desde el propio Cabildo y la Agrupación Socialista Gomera (ASG) que gobierna en esta institución y mantiene tres diputados en el Parlamento canario. Precisamente, en este último ámbito Curbelo ha presentado diversas preguntas a los sucesivos responsables de la Consejería de Transporte. Y es que nadie duda de que la nueva ruta tendrá una especial relevancia en aspectos como la posibilidad de incrementar la oferta de movilidad interior centrada en estos momentos en la red de guaguas.
Una vez que esté en marcha los vecinos de Valle Gran Rey y Playa de Santiago podrán acudir de forma rápida y económica a San Sebastián a consultas médicas o por razones de trabajo o para realizar compras. Y al revés, los de la Villa estarán más cerca de las playas y lugares de ocio de los otros núcleos costeros.
Las previsiones apuntan a que durante los meses de verano serán 20.000 los canarios que elegirán La Gomera como lugar de descanso. No resulta descabellado pensar que de esa cifra gran parte serán usuarios de la nueva línea, con lo cual las fechas elegidas se convierten en doblemente idóneas.
La relación tan estrecha entre La Gomera y el mar alcanzó un hito muy especial el 8 de julio de 1974 cuando se puso en marcha el ferry Benchijigua, que 43 años después sigue uniendo a la Isla con Los Cristianos. Gracias a esta conexión La Gomera dio un indudable salto cualitativo desde el punto de vista económico y social.
Pero el inicio de línea interior en realidad es un regreso. Tal y como recuerda el periodista especializado en estas cuestiones, Juan Francisco Díaz Lorenzo, desde el año 1986 a 2012 este trayecto se ha venido cubriendo a través de distintas opciones. Primero lo asumió la empresa Trasmediterránea con el barco Barracuda que partía desde Los Cristianos y cuyo nombre aún se recuerda. Aunque en realidad luego operaron otras bautizadas como Pez Volador y Marrullo.
A continuación el servicio fue asumido hasta 2008 por la empresa Garajonay Express de capital mixto de La Gomera e Italia que también unía Los Cristianos con San Sebastián y a partir de aquí enlazaba con Playa de Santiago y Valle Gran Rey. En aquel entonces los nombres de las naves fueron Victoria M., Orone y Garajonay.
Finalmente, entre marzo de 2009 y enero de 2012, Fred. Olsen Express cubrió el trayecto entre San Sebastián y Valle Gran Rey, con el catamarán que ya se llamaba en aquel entonces Benchi Express. Durante este tiempo se llegaron a mover unos dos millones de pasajeros, casi medio millón al año. Y no fue por casualidad: La diferencia de precios y de tiempo de recorrido convirtieron a este medio de transporte en un rotundo éxito. Desde 2013 se sucedieron los intentos para volver a poner esta línea en marcha, aunque sin demasiada suerte hasta ahora que por fin será una realidad.
Desde el Cabildo y el Parlamento de Canarias, en el que Curbelo ocupa un escaño como diputado regional, se han presentado a lo largo de los últimos años diversas iniciativas y ejercido acciones con el fin de que este medio de transporte se concretara lo antes posible. El correspondiente decreto fue aprobado a finales del año 2014 y en el mismo se recoge un descuento del 75% en el billete que compren los residentes de La Gomera, mientras que para el resto de canarios es del 50% En el primer caso la diferencia la pone el Gobierno canario porque en el aumento de la bonificación recientemente aprobado por el Estado no se incluían las líneas marítimas interiores como ésta.
El Consejo Consultivo consideró en su momento justificado el esfuerzo económico del ejecutivo autónomo en cuanto que el nuevo servicio, “además de constituir una vía de comunicación esencial de núcleos poblacionales, algunos con una importante actividad económica y turística, contribuye a superar las dificultades orográficas que la Isla presenta, por lo que esta medida va dirigida a paliar el coste de los desplazamientos de los residentes gomeros que por motivos laborales o de otra índole se ven obligados a desplazarse entre estos núcleos poblacionales”. Curbelo solicitó también en su día que los puertos de Playa de Santiago y Vueltas en Valle Gran Rey, en los que recalará la embarcación sean acondicionados para que puedan prestar este servicio en condiciones.
En la anterior etapa el catamarán Benchi Express comunicaba San Sebastián de La Gomera con Playa de Santiago en 18 minutos y este último puerto con Valle Gran Rey en 25. La diferencia de tiempo por carretera es notable si se tiene en cuenta que desde esta última localidad a la capital de la Isla se puede tardar cerca de una hora, atravesando las tortuosas vías que discurre por la escarpada geografía insular.
El servicio marítimo era utilizado no sólo por vecinos de los municipios comunicados, entre los que estaban trabajadores o estudiantes, sino también por numerosos turistas que cada día llegaban al puerto de San Sebastián y continuaban hacia sus destinos a través de esta vía.
Cuando en 2012 dejó de operar se produjo una fuerte reacción por parte de la clase política, social y económica de la Isla que consideró que afectaría negativamente al desarrollo económico insular. Pese a ello, lo cierto es que no se ha podido retomar hasta ahora, después de múltiples esfuerzos, intentos y negociaciones.
El director del Hotel Valle Gran Rey, José Luis Mateo, tiene muy claro que se trata de un paso fundamental en el impulso de La Gomera y de este municipio. “Ahora estamos más cerca de que las visitas de un día se puedan convertir en estancias de una semana. Lo cierto es que deseamos que se ponga en marcha lo antes posible porque los beneficios van a ser inmediatos para los vecinos, turismo, pequeños comercios y en general para todos”.
Guillermo Barroso vive en Valle Gran Rey y es conductor de vehículos de emergencia. Fue un usuario de esta línea cuando estaba en marcha y de aquel entonces sólo guarda “recuerdos muy bonitos”. Lo principal era que se trataba de una manera rápida y muy económica de unir los pueblos del sur de La Gomera con la Villa. El precio apenas pasaba de los dos euros con lo cual “resultaba casi tan económico como tomar un cortado”, recuerda. La línea servía tanto para ir a almorzar fuera del municipio en un día festivo como para hacer compras o gestiones en San Sebastián. También recuerda que en más de una ocasión prestaron servicios para salvar vidas humanas.
Aspectos técnicos
La nueva nave mide casi treinta metros de largo y nueve de ancho y tendrá capacidad para 250 pasajeros, que se distribuirán en dos cubiertas. Una será la principal donde irán los viajeros con espacios reservados para quienes tengan problemas de movilidad reducida y contará con una cafetería. La cubierta superior estará habilitada para acoger a 100 personas que podrán disfrutar del viaje al aire libre. También será posible transportar motos o bicicletas pero no vehículos. Curiosamente, ya en los tiempos en los que Trasmediterránea cubría la línea se intentó realizar, sin éxito, el atraque de un fast ferry con capacidad para desplazar coches.
Ahora las previsiones son que se harán tres trayectos diarios. La compañía ha invertido tres millones de euros en la puesta en marcha de esta nueva línea que contará con otras novedades técnicas como la posibilidad de sacar el billete directamente desde unas máquinas. Los pasajeros también recibirán información a tiempo real a través de unos paneles sobre el tiempo que resta para la llegada del barco, entre otros aspectos.