IU-ECOAQUA considera estratégico este ordenamiento para la protección del patrimonio natural marino.
Los investigadores del Instituto Universitario de Acuicultura y Ecosistemas Marinos Sostenibles (IU-ECOAQUA) de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) que han participado en el proyecto europeo Macaronesian Marine Spatial Planning (MarSP) han finalizado su tarea con los deberes hechos. Durante el transcurso de los dos últimos años han reunido a más de 250 agentes relacionados con distintos sectores marítimos del Archipiélago para determinar la distribución, tanto espacial como temporal, de las actividades económicas que se desarrollan en los más de 455.000 Km² que abarca el perímetro de las aguas canarias.
El proyecto MarSP está financiado por la agencia EASME de la Unión Europea con alrededor de 1.725.000€, y tiene como objetivo general apoyar los procesos de Ordenación del Espacio Marino en las tres regiones ultraperiféricas europeas presentes en la Macaronesia: Azores, Madeira y Canarias; en consonancia con la Directiva Europea en Planificación Espacial Marina (Directiva UE 2014/89), y con la premisa de que se garanticen los mecanismos de cooperación transfronteriza, la prestación de servicios ambientales y la preservación de la biodiversidad marina. Esta directiva será de obligada aplicación en 2021, por lo que le corresponde al estado ejecutar la ordenación de las aguas canarias y garantizar la prestación de servicios ambientales y la preservación de la biodiversidad marina en toda su extensión.
En las últimas décadas, con el crecimiento de la economía azul, se ha producido un aumento significativo de la demanda y la competencia por la utilización del espacio marítimo con la participación de múltiples actores vinculados a diversas actividades relacionadas con la investigación científica, la ecología y la economía. En este último caso, nos referimos a la acuicultura, la pesca, el turismo, el ocio, las prospecciones petroleras, el transporte marítimo, a la minería con la consecuente explotación y extracción de materias primas, a las energías renovables y no renovables, y también a la tecnología y conectividad.
En el caso de Canarias, la comunidad científica está especialmente preocupada por la conservación de cetáceos, mamíferos que se encuentran en peligro de extinción. Así lo afirmó hoy Inmaculada Herrera, una de las investigadoras de IU-ECOAQUA que participa en MarSP, que explicó como cierre del proyecto que “las islas son un archipiélago con una extraordinaria riqueza y diversidad de cetáceos, donde se pueden observar hasta 30 especies diferentes de las 90 descritas en el mundo. Esta gran riqueza significa que algunas áreas han sido consideradas como Zona de Especial de Conservación (ZEC) para la protección de estos animales, pero actualmente no solo abundan en las áreas delimitadas, por lo que el plan que debe presentar el Ejecutivo Estatal en Europa en 2021 debería considerar la ampliación de estas zonas para una mayor conservación”.
“Estamos hablando de información contrastada tras la observación de ballenas en tres ZEC canarias (Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife) a lo largo de 8 años”, subrayó Herrera. Revisar la legislación existente sobre todas las actividades que se pueden desarrollar en aguas de las islas es crucial para el desarrollo de esta ordenación del espacio marino.
Hoy se recogieron los resultados del proyecto MarSP, en una última jornada de diseminación en el Parque Científico Tecnológico de la ULPGC, en la que Elena Proietti, investigadora también del proyecto MarSP, instó al estado a que tome en cuenta las sugerencias que se elevarán para mejorar la salud del mar y facilitar la sostenibilidad en el desarrollo de actividades económicas.
Entre los trabajos presentados destaca también la creación de una herramienta informática de gestión para el ordenamiento marino. MarSP ha optimizado el diseño de una red de Áreas Marinas protegidas (AMP) en Canarias a través del uso de un software de planificación de conservación llamado Marxan, en un análisis que ha sido realizado por parte del investigador Andrea Zanella.
En este proyecto, que tiene como coordinador en la ULPGC al catedrático Ricardo Haroun, participan otras instituciones y universidades españolas como el Instituto Español de Oceanografía (IEO), la Universidad de Sevilla (US), y la Universidad de Cádiz (UCA). Por parte de Portugal intervienen el Fondo Regional de Ciencia y Tecnología de Azores (FRCT), como coordinador general del proyecto MarSP, la Dirección Regional de Asuntos Marítimos del Gobierno Regional de Azores, la Secretaría Regional de Medio Ambiente de la Dirección Regional de Ordenación del Territorio del Gobierno Regional de Madeira, la Dirección General de Recursos Naturales, Seguridad y Servicios Marítimos de Madeira, y la Dirección General de Política Marítima de Madeira.