Poema del Mar, uno de los acuarios más espectaculares del mundo, no dejará indiferente a nadie desde el momento en el que se abran las puertas de esta instalación ubicada en el muelle Sanapú de Las Palmas de Gran Canaria. Especies diferentes, extraordinarias y muy difíciles de ver serán las protagonistas en este espacio para la biodiversidad marina.

Uno de los peces que sorprenderá a los visitantes tendrá su propio espacio temático en Poema del Mar: el pez humano (Proteus anguinus), una curiosa especie que vive en cuevas de Eslovenia y Croacia, con apariencia humana, capaz de aguantar hasta 4 años sin comer. Para acoger a este asombroso animal que se encuentra en situación “vulnerable”, 4 ejemplares de pez humano vivirán en una exhibición de 5 metros cúbicos cuya tematización está ambientada en una cueva donde predominan las estalactitas, imitando su hábitat natural.

Para recrear lo más posible su ecosistema, esta exhibición contará con el lodo de las cuevas donde suele habitar, dado que las sales minerales que contiene son importantes para la piel de los individuos. Además, un factor a tener en cuenta será la luminosidad del espacio, que, para asemejarse a su ecosistema, será muy tenue, aunque perfecta para que los visitantes puedan observarlos sin dificultades. Sin duda, se trata de una especie muy complicada de ver en los acuarios internacionales.

El proteo es una especie de anfibio perteneciente a la familia Proteidae, compuesta por seis especies de anfibios caudados de hábitos de vida completamente acuáticos. Su cabeza es alargada con un hocico redondo y su cuerpo es cilíndrico con una longitud que varía entre los 20 y los 30 centímetros. Los machos son ligeramente más grandes que las hembras y en época reproductiva pueden ser distinguidos por una cloaca de mayor envergadura.

Cuentan con presencia de agallas externas a ambos lados de la cabeza que son utilizadas en la respiración y las conservan toda la vida a pesar de que los individuos adultos también desarrollan pulmones. La cola es pequeña y aplanada lateralmente; su coloración es pálida entre blanco a rosáceo cuando están en zonas con poca luminosidad, si la luz es más intensan suelen cambiar el color de la piel a tonalidades más oscuras.