“Jurásico, la isla perdida” desplegará toda su magia con multitud de funciones que se representarán a partir del día 22 de junio en Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife y La Palma.
Por un descuido, unos dinosaurios se han escapado de sus jaulas. Se desconoce el motivo de la escapada pero lo cierto es que el rumbo que han tomado es el Archipiélago canario, al que llegarán con toda seguridad a finales de junio gracias a una producción asociada entre Makaron Gestión y Proyectos Culturales y Acelera Producciones llamada “Jurásico, la isla perdida”. Los dinosaurios y sus cuidadores se quedarán unos cuantos días por las islas, pues la ruta dará comienzo el 22 de junio en Lanzarote y continuará el 24 en Fuerteventura. A estas funciones se sumarán tres paradas en Gran Canaria, donde el show visitará las ciudades de Las Palmas de Gran Canaria, Telde y Carrizal. Por último, el espectáculo toma rumbo a Tenerife y finalmente terminará en La Palma el 1 de julio. Las entradas para todas las islas están en www.aceleraproducciones.com
Por orden, las fechas, recintos y ciudades que recorrerán los dinosaurios de “Jurásico, la isla perdida” son las siguientes: 22 de junio en el Teatro Salinero (Arrecife), con dos funciones; 24, en el Palacio de Formación y Congresos de Fuerteventura (Puerto del Rosario); el 26, también con dos funciones a las 17.00 y a las 19.30, estarán en el Teatro Guiniguada (Las Palmas de GC); 28, en el Centro Cívico Carrizal (Ingenio); 29, en el Teatro Juan Ramón Jiménez (Telde); 30, en el Paraninfo ULL (La Laguna) por partida doble y, por último, el día 1 de julio en el Pabellón Municipal de Breña Alta, en La Palma.
El espectáculo infantil del año es una historia para vivirla en familia, ya que por un lado no deja indiferente a los adultos y, por otro, ahonda en la inocencia de los niños. En los 60 minutos de duración del espectáculo se entremezclan todo tipo de valores, emociones y unos increíbles animales de altura. Hay suspense, humor, una historia de amor, amistad, ilusión y valentía. Se trata de una experiencia prehistórica que inundará el patio de butacas de emoción a raudales con un evidente mensaje ecológico.
La trama
La historia comienza con Paco Cuesta, un intrépido veterinario de especies tropicales que está a punto de presentar el primer laboratorio transgénico para especies grandes. Por su parte, la presentadora de televisión Casandra Ramires interrumpe en su laboratorio después de que, por un descuido, liberara una serie de dinosaurios de sus jaulas. A partir de ahí, los dos tendrán que enfrentarse a una desternillante y divertida aventura en la que necesitan la ayuda de los niños, pues los dinosaurios corren peligro y hay que protegerlos de todos los peligros que acechan en el exterior.
Esto causa situaciones verdaderamente cómicas con la interactuación de los actores con los niños, los peligros que atenazan en una jungla llena de seres vivos aún por descubrir, con el primer vuelo de una “avioneta” dentro de un teatro y con el aprendizaje del público de cómo se tienen que comportar cuando llegue el contacto real con los dinosaurios del show.
Accidentes, fallos técnicos, escapadas, tormentas y muchos efectos especiales, transportarán al público a una alucinante aventura llena de ternura, con los nacimientos de los primeros bebes dinosaurio en libertad y en plena naturaleza, emitido en directo por una TV vía streaming. Efectos especiales y dinosaurios muy reales (algunos de los recreados superan los cinco metros de longitud y pesan 38 kilos) consiguen transportarte a una especie de tierra prometida llamada “Jurásico. La isla perdida” en la que la trama te deja con ganas de más.
Se trata de un nuevo concepto de espectáculo cultural familiar donde se consigue una perfecta unión entre cultura, diversión, ecología, medio ambiente, espectáculo, tecnología, imagen, sonido y diversión. Con una puesta en escena completamente exótica, el público se verá inmediatamente integrado dentro del show, en las más comunes situaciones que rodean al mundo animal, pero con la particularidad de que los personajes a los que les suceden las aventuras son, a los ojos del público, auténticos dinosaurios. Toda la trama provoca la más completa experiencia teatral para toda la familia.