El ‘pico de coral’ supone una amenaza para el medio rural y las especies autóctonas del Archipiélago.

Agentes del Grupo de Medio Ambiente (GRUMA) del Cuerpo General de la Policía Canaria incautaron hace unos días a un ciudadano español cuatro ejemplares de ave de la especie Estrilda Astrild, cuyo nombre común es ‘pico de coral’, incluidas en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras.

La actuación policial se llevó a cabo tras detectar que las aves se encontraban a la venta por un particular, que resultó haber sido sancionado con anterioridad por el Cuerpo General de la Policía Canaria por la venta de otras aves exóticas invasoras.

Los agentes procedieron a la incautación de los ejemplares tras constatar que el propietario no contaba con la preceptiva autorización. Posteriormente, las aves fueron trasladadas a Cocodrilo Park, empresa adscrita al convenio con el Ministerio del Interior para la protección de este tipo de especies.

El área natural del ‘pico de coral’ se encuentra en el África subsahariana, en zonas con vegetación palustre; pero, al ser altamente adaptables, también se encuentran en parques, jardines o cultivos.

Esta especie supone una amenaza para el medio rural y las especies de las Islas desde el punto de vista ecológico, ya que puede dificultar el reclutamiento o la regeneración de especies nativas, a la vez que facilita el desarrollo de otras especies invasoras. Por otro lado, también puede producir un impacto económico negativo con su reproducción, ocasionando daños en el entorno.

Los agentes recuerdan que la posesión, transporte, tráfico o comercio de especies incluidas en el Catálogo de Especies Exóticas Invasoras sin la correspondiente autorización administrativa, está tipificado como infracción muy grave si la valoración de los daños supera los 100.00 euros o infracción grave si la valoración de los daños es menor.

Las infracciones muy graves pueden ser sancionadas con multas de 200.001 a 2.000.000 euros y las infracciones graves con multas de 3.001 a 200.000 euros.