Las zonas recreativas de Arure y Las Hayas han mejorado sustancialmente tras las obras realizadas con cargo a las ayudas para las áreas de influencia socioeconómica de los Parques Nacionales de Canarias para el ejercicio de 2018.
El Ayuntamiento de Valle Gran Rey ha realizado la mejora la accesibilidad de dos de sus zonas recreativas con proyectos subvencionados en las ayudas para áreas de influencia de los Parques Nacionales. De tal forma, las zonas recreativas de Arure y Las Hayas han mejorado sustancialmente tras las obras realizadas, que han supuesto una inversión de 86.930,57 euros.
El proyecto “Mejora de los accesos y del área recreativa de Arure”, ha supuesto la generación de una zona de parking, de una rampa de acceso a la zona recreativa, además de la adquisición de mesas y otros elementos (horno y campanas), a partir de una inversión de 70.855,94 €, que dotan de este equipamiento de una mayor calidad y de mejor seguridad. Es de reseñar que, en este caso, la accesibilidad de la zona recreativa, también beneficia al Centro Cultural de Arure.
Por su parte, el proyecto “Mejora de los accesos y del área recreativa de Las Hayas” ha supuesto una inversión de 16.074,63 €, con lo que se ha conseguido asegurar la accesibilidad a la zona recreativa, la colocación de mesas y barandas, y elementos propios de los fogones del equipamiento. Hay que destacar que con este proyecto también se asegura la accesibilidad a la plaza de Las Hayas y a la Ermita de Coromoto.
Desde el Ayuntamiento de Valle Gran Rey se recuerda que el uso particular de estas instalaciones requiere obligatoriamente de presentar solicitud con una antelación de 15 días. “Hemos habilitado en la página web una sección específica para asegurar la adecuada gestión de estos equipamiento (http://vallegranrey.es/ciudadania/areas-recreativas-y-merenderos/)”, explica Guzmán Correa, concejal de Medio Ambiente, “con el fin de asegurar un buen atendimiento de las solicitudes”. En esa sección existe una agenda donde se va señalando la disponibilidad de cada área.
En ese sentido se recuerda que, durante época estival y alertas de olas de calor, el uso de los fogones de las zonas recreativas está limitado o directamente prohibido. “Las solicitudes no tienen, en ningún caso, un carácter limitante: solo pretenden asegurar aminorar riesgos de incendios, que dos celebraciones no coincidan simultáneamente en área y fecha, y poder asegurar el acceso a los servicios a las personas solicitantes”, insiste el concejal.
El municipio cuenta con otras áreas recreativas como la de Taguluche o la zona ajardinada de la trasera de la Casa Cultural. “Es intención de este gobierno seguir trabajando en el mantenimiento y la mejora de las áreas recreativas por considerarlas espacios fundamentales de convivencia comunitaria”, explica Correa.
“Queremos mejorar todos los equipamientos en cuestiones de recogida selectiva, información de uso, seguridad y educación ambiental, y otros aspectos de mantenimiento para que la ciudadanía pueda disfrutar adecuadamente de estos espacios de esparcimiento” finaliza su intervención el concejal.