La Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife urge a que exista un gobierno nacional con capacidad de adoptar las reformas estructurales que necesita el país, pero advierte que ha de ser prudente en su toma de decisiones para no poner en riesgo el crecimiento económico y del empleo.
La temporada alta turista y la campaña navideña han vuelto a traer buenas noticias al mercado laboral de las islas que ha visto reducir en 2.644 el número de parados inscritos en las oficinas de empleo público, además de ver incrementada la afiliación media a la seguridad social en 2.563 personas durante el mes de diciembre. Datos positivos, pero que pierden intensidad en sus avances respecto a los registros de hace un año.
En el cómputo anual los parados aumentaron en 1.234 personas y los afiliados en 14.441 hasta situar las cifras totales a finales de 2019 en los 208.249 parados inscritos en las oficinas de empleo público y en los 827.428 los afiliados medios a la seguridad social. Unos datos que comienzan a mostrar un menor dinamismo en el mercado de trabajo canario puesto que la cifra de parados es un 0,6% superior a la de finales de 2018, frente al retroceso nacional del -1,2% y los afiliados medios a la seguridad social, a pesar de que continúan creciendo a una tasa anual del 1,8%, pierden intensidad respecto al crecimiento que se registraba un año antes (3,4%), además de crecer por debajo de la media española (2%).
Ante este escenario de debilitamiento progresivo del empleo, desde la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife se insiste en continuar apoyando el crecimiento y la consolidación de las empresas canarias con una política de inversión y de simplificación administrativa que dinamice y estimule la economía en el actual escenario de desaceleración. Asimismo, el presidente cameral, Santiago Sesé, ha puesto énfasis en “la necesidad urgente de que exista un gobierno nacional con capacidad de adoptar las reformas estructurales que necesita nuestro país, pero que a la vez sea prudente en su toma de decisiones”. “Una prudencia que debe venir marcada por la búsqueda de equilibrios y no por decisiones electoralistas que puedan poner en riesgo la continuidad del crecimiento económico del país, además de la sostenibilidad de las cuentas públicas y con ello el estado del bienestar alcanzado”.
En esta línea y ahondando en el ámbito laboral Sesé cree que, “las anunciadas modificaciones en la regulación laboral han de tener en cuenta la coyuntura actual y los objetivos para alcanzar una economía competitiva conformada mayoritariamente por autónomos y pymes, con unos gastos sociales importantes que, de aumentarse, podrían acentuar el crecimiento de la economía sumergida de nuestro país, ya de por sí elevada, además de reducir las contrataciones.” Del mismo modo continúa afirmando que “será crucial para mantener la competitividad que los salarios se vinculen a la productividad de los trabajadores, que deberá estar acompañada de un refuerzo en la formación continua para afrontar los retos que supone la digitalización de la economía.”
El crecimiento del desempleo se generaliza al conjunto de sectores productivos.
En el último año todos los sectores económicos han visto incrementar su número de parados registrados. El mayor valor absoluto lo registra el sector servicios con 1.397 desempleados más, seguido del aumento en construcción con 344 parados más que en diciembre de 2018, la agricultura con 317 más y la industria con 215. El único colectivo que ha visto reducir su número de parados en el último año ha sido el de “sin empleo anterior” con 1.039 parados menos que hace un año.
Atendiendo al registro mensual, el único sector que experimenta un retroceso en su número de parados respecto a noviembre es el de Servios con un descenso del 1,6% que supone 2.566 parados menos debido, fundamentalmente a los retrocesos experimentados en las actividades de “Hostelería”, por la temporada alta turística, con 862 parados menos y “Comercio al mayor y menor, reparación de vehículos y motocicletas” por las contrataciones de refuerzo navideño con 734 desempleados menos que en noviembre. El colectivo “sin empleo anterior”, fue el que mayor descenso de parados experimentó en el mes con 1.042 parados menos que en noviembre. Las ramas de actividad que experimentan un mayor aumento del paro son “Construcción” con 816 desempleados más y “Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca”, que aumenta en 110 personas.
Con relación al perfil del desempleado se observa una leve caída anual entre el colectivo de desempleados menores de 25 años (-0,5%) hasta situarse estos en los 13.904 parados, mientras que las personas mayores de 25 años han visto incrementar su cifra un 0,7% en el último año hasta alcanzar la cifra de 194.345 en diciembre de 2019.
Por sexo, en el último mes sube el paro entre los hombres (0,2%) y desciende entre las mujeres (-2,4%), al igual que sucede en el último año con un retroceso del 0,4 % entre el colectivo de mujeres, 483 paradas menos, y un aumento del 1,9% entre los varones, con 1.717 parados más en el último año.