En una operación llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil, se ha logrado incautar más de una tonelada de productos fitosanitarios en una nave ubicada en el municipio de Frontera, en la Isla de El Hierro. Esta actuación ha sido posible gracias al trabajo conjunto del Servicio de Protección a la Naturaleza (SEPRONA) y el Servicio Cinológico, que desplazaron a sus efectivos desde el Pardo Madrid.
La intervención se realizó a principios de este mes, cuando los agentes descubrieron la presencia de diversos tipos de productos fitosanitarios clasificados como nocivos, tóxicos o muy tóxicos. Estos productos representan un grave riesgo para la salud humana y el medio ambiente, por lo que su tenencia y uso están regulados por una estricta normativa.
Durante la inspección, se constató que el responsable de los productos fitosanitarios no estaba registrado en el Registro Oficial de Productores y Operadores de medios de Defensa Fitosanitarios (ROPO) del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Esta situación constituye una violación de la Ley 43/2002 de sanidad vegetal y el Real Decreto 1050/2022, que establece el marco para un uso sostenible de los productos fitosanitarios. Ambas normativas establecen sanciones económicas que van desde los 3.001 hasta los 120.000 euros para este tipo de infracciones, las cuales son consideradas graves.
Además, esta actuación también contraviene la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados para una economía circular, en concordancia con la Orden APA/1610/2003, que regula la retirada de productos fitosanitarios que contengan sustancias activas excluidas de la lista comunitaria. Estas normativas contemplan sanciones económicas que oscilan entre los 20.001 y los 600.000 euros.
Como consecuencia de ello, los productos fitosanitarios han sido inmovilizados y puestos a disposición de la Autoridad Competente, quien determinará las acciones a seguir. Es importante destacar que el uso de estos productos puede tener un impacto negativo en la salud de las personas y en el equilibrio medioambiental, por lo que su control y aplicación responsable son fundamentales.
La Guardia Civil, a través del SEPRONA, continúa trabajando de manera constante para garantizar el cumplimiento de la normativa vigente en materia de productos fitosanitarios y protección del medio ambiente. Estas actuaciones demuestran la importancia de mantener una estrecha colaboración entre las autoridades competentes y la sociedad en general, con el objetivo de preservar nuestra salud y el entorno natural en el que vivimos.