José Antonio Cabrera. ASSOPRESS.
Andy lo consiguió. Después de 13 días de tensa espera en Dover, el 7 de agosto a las 8:00 de la mañana Andy recibió la ansiada llamada del patrón del Pathfinder. A las 9:00 embarcaba rumbo a la playa de Samphire Hoe desde donde a las 10:17 comenzaba su reto de cruzar el Canal de la Mancha. Las condiciones meteorológicas no eran las idóneas, aún así Andy decidió que había llegado el momento y se dispuso a intentar su reto, nadando rumbo a Calais.
La marea alta de las 11:50 marcaba el inicio de un tramo donde Andy era arrastrado hacia el este, durante las 6 horas en las que la marea bajaba. A pesar del fuerte oleaje y del viento, que rompía las crestas de las olas y hacían el nado muy incómodo, las primeras horas fueron muy rápidas, logrando hacer casi 20 kms en 4 horas.
Poco a poco el agua se fue enfriando, desde los 17 grados iniciales fue bajando hasta los 16 del centro del Canal, para luego subir hasta los 17 de nuevo en la costa francesa.
Los grandes cargueros que atraviesan el Canal hacían aún más complicado el nado, al provocar oleaje adicional y las medusas hacían su acto de aparición cada tanto, picando a Andy en dos ocasiones.
A pesar de todo Andy seguía muy fuerte, 25,5 kms a las 6 horas, a las 6 horas y 5 minutos alcanza el centro del Canal y a las 8 horas acumula 32 kms. Ya encogido del frío, se concentraba en dar el mayor número de Brazadas Valientes, a favor de los niños de Pequeño Valiente y es que Andy puso a la venta las 50.000 brazadas que iba a dar a 1€ la brazada.
A las 9 horas de nado y ya metido en el Canal francés se produce el cambio de marea, empieza a subir y Andy es arrastrado hacia el oeste. Es entonces cuando el capitán le dice que debe aumentar el ritmo, para no perder la oportunidad de tocar la costa francesa al este del cabo Gris Nez. Pasar de largo el cabo supondría varias horas de nado extra.
Andy aprieta los dientes y sacando fuerzas de flaqueza se pica con la propia embarcación para aumentar el ritmo. Ya con la costa de Francia a la vista, consigue entrar en la zona de protección de la corriente y por fin se vislumbra el final de la aventura. Tras 12 horas de nado lleva recorridos 49 kms y la noche ha caído ya hace dos horas. La playa no se ve, sólo luces en el paseo, menos olas y poco viento acompañan a Andy sus últimos metros que sigue braceando a ciegas hasta que sorpresivamente toca arena con su mano derecha.
Tras el susto inicial por tocar “algo”, se llena de alegría y se pone de pie, con el agua por las rodillas decide acabar su odisea caminando, hay que recordar que la finalización del reto, al igual que el comienzo, ha de ser con todo el cuerpo fuera del agua. Lejos de disminuir el nivel del agua, Andy descubre que le llega a la cintura, por lo que decide volver a nadar.
Varias dunas tuvo que pasar hasta que por fin consigue alcanzar la arena seca, ponerse de pie y gritar satisfecho “Siiiiiii”. Nadie le oye, pero el reto ha terminado, está de pie en la playa del norte de Wissant, entre Calais y el cabo Gris Nez, son las 22:57 y acaba de nadar 51.300 metros en 12 horas y 40 minutos, a un ritmo medio de 1 minuto y 28 segundos los 100 metros, incluidas las paradas.
Es el primer nadador canario que consigue cruzar a nado el Canal de la Mancha, y el español número 14.
Enhorabuena Andy, tus amigos nadadores del Club Metropole, que te conocemos bien y vemos tu trabajo y sacrificio con largas horas de entrenamiento diario, sabíamos que lo lograrías.