El Gobierno de Canarias pide al Estado que estudie las consecuencias para los pescadores isleños de algunas prácticas de pesca de atún en Senegal y Mauritania
Se trata de dispositivos concentradores de peces (DCP), que se pide prohibir temporalmente, y que están provocando desde 2015 cambios en el comportamiento migratorio de esta especie.avijo se reúne con los representantes las federaciones de pesca.
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha informado hoy a los representantes las federaciones de pesca de la remisión al Estado de una solicitud para que se estudie el impacto de determinadas prácticas pesqueras en la zona de Senegal y Mauritania. Estas prácticas, desarrolladas por la flota española atunera de cerco y cebo vivo, están provocando cambios en el comportamiento migratorio de esta especie, lo que afecta de manera significativa a las capturas de la flota artesanal canaria que desarrolla su actividad más al norte.
Esta información fue transmitida por Fernando Clavijo y el consejero autonómico de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, a los representantes de los pescadores de las Islas, quienes habían trasladado al Ejecutivo autonómico la preocupación de los pescadores de las Islas por estas prácticas.
Según información recabada por el Gobierno de Canarias, la flota atunera canaria, compuesta por unas 200 embarcaciones, ha experimentado durante el primer semestre de 2018 un acusado descenso de capturas de las especies de atunes de mayor abundancia en aguas de las Islas: patudo, rabil, blanco y listado.
Las prácticas de pesca de esta especie en las Islas, principalmente con caña y liña de mano, es muy selectiva y de reducido impacto ambiental, como se ha comunicado al Ministerio en otras ocasiones, por ejemplo en los estudios previos sobre la pesquería de atún rojo. La flota canaria se basa, pues, en mantener un equilibrio sostenible respecto a la explotación de los recursos migratorios en los que se sustenta.
Por ello, según han confirmado durante la reunión, existe en el sector una preocupación relativa a que el comportamiento migratorio de las referidas especies de túnidos pueda estar siendo alterado, gravemente, por los métodos de pesca ejercidos por las flotas que operan en las aguas bajo derechos de soberanía de Senegal, Mauritania y Cabo Verde, entre ellas las flotas españolas de cerco congeladora y de cebo vivo, por el uso de dispositivos concentradores de peces (DCP) que afectan a la dinámica de los bancos de atunes, actuando como una barrera contra sus movimientos migratorios naturales.
Su uso, y el creciente de objetos flotantes, ha sido bien documentado durante los años 2015 y 2016, creciendo probablemente en intensidad durante los años 2017 y 2018 y provocando, por tanto, una afección en la presente campaña de pesca al comportamiento migratorio de los túnidos habituales en el área de Canarias.
El Gobierno de Canarias, y así lo ha explicado a los representantes de los pescadores de las Islas, ha solicitado al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que encargue un estudio al Instituto Español de Oceanografía (IEO) sobre este tipo de prácticas y sus consecuencias en la pesquería de túnidos, al tiempo que redacta una prohibición temporal del uso de este tipo de dispositivos. El Ejecutivo autonómico pide así mismo en su escrito que esta situación sea puesta en conocimiento de la Comisión Europea para que impulse medidas temporales por parte de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (CICAA) respecto al uso de estos dispositivos.