El principio activo de este medicamento pertenece a un grupo conocido como burocracia, aliviando de forma efectiva, el enojo, disgusto, cabreo o cólera, que suele tenerse, no esporádicamente, sino continuamente, cuando hay que hacer alguna gestión administrativa pública.
Tiene la capacidad de aplacar, todo de forma instantánea. Disminuye la presión arterial, relajando los vasos sanguíneos, evitando dañar órganos como el corazón, riñones, cerebro. En algunos casos, esto puede llevar a un ataque cardiaco, insuficiencia cardiaca, accidente cerebrovascular.
Pues nuestro gozo en un pozo, pues el citado medicamento, ya no se encuentra ni en las farmacias, ni en las cooperativas farmacéuticas, porque está agotado. Ha sido tanta la demanda que los laboratorios fabricantes de este, no han tenido tiempo de reponer los pedidos o encargos requeridos por la ciudadanía y especialmente por los empresarios. Ahora se está ensayando también una vacuna en Chinatown, imagínense.
La burocracia está matando el sistema productivo, hiriendo la actividad económica, hundiendo literalmente a las pymes, microempresas y autónomos, siendo un muro infranqueable para la creación de empleo.
El Gobierno de Canarias, por electoralismo y cobardía, quiere implantar el teletrabajo, que no es un derecho, sino una nueva forma de organización del trabajo, que funciona muy bien en la iniciativa privada, cuando se implanta, porque tiene los correspondientes protocolos de cuantificación de la productividad y objetivos a conseguir de cada trabajador.
En cambio, en la Función Pública, no ha habido, desde el comienzo de la pandemia de la COVID-19, reconocido públicamente por el Gobierno de Canarias, ninguna comprobación o inspección de los funcionarios que se han quedado en sus casas cómodamente trabajando o por lo menos, eso dicen.
Vamos a poner dos casos recientes. Viene por mi despacho una señora mayor, el martes 11 de abril de 2023, para contarme que le había salido una mancha en su cuerpo, no digo donde, porque no viene al caso.
Pide cita a su Centro de Salud y le dan para después de veinte días, cuando por fin la ve el médico, muy prudentemente, la deriva al especialista en Tomé Cano de forma preferente, porque no le gustaba lo que veía, diciéndole que fuera al mostrador para que la auxiliar le diera día y hora.
Ahí empieza la odisea, le dice que la primera cita que tienen es para octubre del próximo año, de todas maneras, con el ánimo de ayudar, lo que hay que reconocer que es encomiable, la referida auxiliar, mira para ver si por lo ordinario consigue un tiempo más rápido y sucede lo que nadie se puede creer, pues si, le dan hora para junio de 2024, ha conseguido adelantarle la cita cinco meses.
Saliendo del Centro de Salud, no le queda más remedio que llamar, para pedir hora a una dermatóloga particular, porque podría tener algo peligroso y el tiempo en estos casos hay que reducirlo lo más rápido posible, para diagnosticar bien y a tiempo. Toda una vida pagando la Seguridad Social para terminar así.
El otro caso, es de un amigo, gran profesional de la economía, asesoría y consultoría, textualmente me envía un whatsapp: “Hola Óscar, lamentablemente, la página web de la sede electrónica de la Agencia Tributaria Canaria sigue funcionando igual de mal. Muchos avances informáticos, pero parece que a la misma no llegan.
Lo curioso es que periódicamente se reúnen con responsables del Colegio de Titulares Mercantiles y Economistas, en el denominado Foro de las Corporaciones y la respuesta siempre es la misma, que se está trabajando en mejorar el servicio de la página web. Es triste la imagen que da esta Administración Pública, pero, como diría el paisano, esto es lo que da nuestra tierra” Oscar Izquierdo, Presidente de FEPECO