Por Jorge Marichal, presidente de Ashotel.
Que los tiempos nos sonrían es fruto de múltiples factores, dos de ellos son, sin lugar a dudas, una coyuntura socioeconómica favorable y una correcta gestión de los negocios turísticos. Pero lo primordial, y todo hay que decirlo, es que contamos con el favor de los turistas, nuestros clientes, y debemos ser conscientes de que conformamos un gran puzle: la comunidad del turismo.
En esa comunidad participan muchos actores (hoteleros, turoperadores, agencias de viaje, empresas de actividad complementaria, instituciones públicas…), cada uno de los cuales aporta su grano de arena, su pata al ciempiés. Sin esa aportación el sector queda cojo y, por tanto, corre el riesgo de debilitarse y romperse. Y en Canarias, ya sabemos, somos hoy el principal motor que tira de su locomotora económica.
Que nos inunde esta bonanza no debe ser sinónimo de que nos dediquemos a actuar por nuestro estricto y exclusivo interés, unos y otros, sino que debemos fortalecer aún más esa interrelación que nos permite ser cada vez mejores. ¡Qué pena de puzle si quedara el hueco de una pieza!
Nuestro destino tiene una importante presencia de la turoperación, gracias a la cual muchos de nuestros hoteles registran importantes porcentajes de ocupación. Si entramos desde el sector hotelero en una escalada de precios que no lleve aparejado un cambio a mejor en la infraestructura o en el servicio, podemos provocar el colapso de estos flujos de turistas. Si este crecer hacia dentro que ya nos han escuchado decir en múltiples ocasiones desde Ashotel tiene una recompensa mayor, bienvenida sea, pero no es lo mismo ser un aprovechado que aprovechar el momento.
Por eso, no tensemos la cuerda del turismo, no nos creamos los reyes del mambo y nos dediquemos a subir precios sin contraprestaciones; trabajemos en aumentar la calidad de nuestros negocios, inyectemos valor añadido a nuestros establecimientos; en definitiva, crezcamos hacia dentro, hagamos mejores nuestras empresas, consigamos que sean más rentables, generemos economía añadida a todo nuestro entorno. Estoy convencido de que solo así tendremos el mejor de los puzles.