Hoy comienza el día con salud, muchas ganas de vivir, un simple cigarro después del Colacao a las siete menos cuarto de la mañana antes de salir el sol, en ésta parte del planeta sin guerras y mucho amor, es una prueba más de “Pura Calidad de Vida”.

Estoy en el sur de Tenerife y desde Santa Cruz, llama un amigo preguntando que vamos a comer hoy. Desde La Camella nos informan que habrá “Carne con papas” y de postre mus de chocolate. Desde el Puerto de Los Cristianos envían a mi whatsapp un trozo de tarta para hacerme daño sicológico, pero aguantamos el dolor, dentro del proyecto “Pura Calidad de Vida” y así acabo el día.

Llegué a casa y mi teléfono móvil marca una llamada perdida de mi hermano Pepe, desde Pozo Izquierdo en el sur de Gran Canaria y dije a mi mismo, “¡Hostias!. ¿Quién será el muerto?”. Mi hermano Pepe, me llama tres o cuatro veces año y siempre es para decirme quién murió.

Parece el dueño de una funeraria llamando al chófer para que vaya a trasladar al difunto. Llamé a mi hermano con aquel miedo por si es un amigo o un familiar, pero que habrá un muerto es seguro. ¡Hola hermano!, ¿Qué tal?…. Hola Juan, ¿Sabes quién se murió?. Andrés. Le dije, ¿Andrés Morales?…. Noooo!! Andrés el hijo de Don Andrés y Doña Paula, en paz descanse, que fueron nuestros profesores en Sardina del Sur.

Actualmente el hijo único Andrés vivía en Fuerteventura, pero se vino para Gran Canaria, porque estaba muy malito…. Le dije a mi hermano, Ahhhh! Vale. Gracias Pepe!! Dale recuerdos a todos. Ditosadios quenoganaunopadisgustos….. El único recuerdo simpático de Don Andrés y Doña Paula en Sardina del Sur fue cuando estaba en la escuela por el año 1.976 escuchando el sonido de la meada de Don Andrés.

Las aulas eran para treinta alumnos aproximadamente y los baños estaban en las mismas aulas. Doña Paula cuando nos hacía un examen de historia, se ponía a cocer ovillos o con aguja barbilla (agujas largas y gruesas) y obviamente nos pegamos unas copiadas brutales, porque no nos miraba a nosotros mientras hacíamos el examen.

Cuando llegaba Don Andrés de visita, iba directamente al baño y mientras meaba y escuchábamos ese sonido del chorro de fondo, mientras preguntaba a su mujer Doña Paula, “¡Paula!, ¿Cómo van los niños?!.

Doña Paula respondía, “, Muy bien “…. Estimado lector, ¿Se imagina ésta forma de actuar de Don Andrés meando mientras habla, la hiciera un profesor actual en cualquier colegio?.

Si lo hicieran hoy y alguien grabaría ésta movida con el teléfono móvil, tendría mucho likes y bla bla bla bla bla bla bla bla bla,. ¡Por cierto!. Compré un cartón de huevos muy grandes y todos tienen dos yemas.

Aquí lo dejo para seguir reflexionando sobre las romerías de los pueblos y estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del Ser humano, el tiempo pasa y jamás volverá. Juan Santana.