El proyecto consiste en aprender a tocar en cuatro días y mi padre en paz descansa decía muchas veces “En la vida hay que organizarse”. Eva es una niña sana de familia casi perfecta porque nada ni nadie es perfecto, pero no fuma, estudia mucho sacando notas de sobresalientes hacia arriba y mosqueada a veces porque esperaba algún Matrícula de Honor, lo cual demuestra qué lleva camino ascendente.

Sus padres le regalaron un Ukelele y un afinador, un instrumento muy pequeño inventado por el año 1.880 y pico en Portugal o Hawái, con cuatro cuerdas y un sonido muy agradable. Entonces decidimos aprender a tocar el Ukelele en cuatro días, comenzando las clases el sábado por la mañana a las 10:00 en la Avenida de El Palmar. Eva ya ha sentido el sonido de las cuerdas y sabe afinarlo, que es un avance para la humanidad. Jamás yo había tocado un Ukelele, pero siendo guitarrista tenemos nociones de las notas y rasgar. Una hora de ensayo, rompiendo dedos, pero siempre en la calle y buscando frescos y sombras de árboles y paredes. Lunes, martes y miércoles con ensayos matinales, cantando y siendo muy felices.

Cumplimos el proyecto de saber tocar a los cuatro días, obviamente ahora toca practicar y será una profesional. Confieso qué el quinto día cuando quedamos para dar un repaso de credibilidad, no pude dormir la noche anterior por los nervios, porque cuando amamos la música sufrimos lo inexplicable. Disimulo mis fatigas, con momentos de casi rendirme y caerme al suelo, pero cuando pedí a Eva que afinara el Ukelele porque los instrumentos tienen que estar perfectamente afinados y descubro qué está “afinando sin afinador”, quedo alucinado y la fatiga se quitó. Cuando alguien afina un instrumento sin afinador, es porque habla bien el idioma musical y por la madre que me parió qué yo no se afinar el Ukelele sin afinador, porque las cuatro cuerdas no llevan el mismo sentido de las guitarras. Ahora toca componer canciones, cantar e intentar ser y hacer felices a los demás, especialmente a las personas más necesitadas.

Eva demuestra qué existen las personas con Ilusiones y Esperanzas, con ganas de Vivir. La música es la mejor herramienta invisible para fomentar las Buenas Relaciones, porque los músicos no son quienes hablan ni cantan, son las Almas Ancestrales a través de sus cuerpos y Eva tiene Alma, Corazón y Vida.

Esta carta escrita con el permiso de su padre, qué se cargó mi teléfono con su baba entrando por mis orejas, cuando hablaba de su hija, es un mensaje de ánimo para quienes lo necesitan.

Felicidades Eva, pero ahora quedan miles de horas que recorrer, pero confiamos en ti y gracias por sorprendernos.

Estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del ser humano, el tiempo pasa y jamás volverá.

Por: Juan Santana.