En lo alto de una montaña quedaron los gladiadores de diferentes ejércitos para practicar artes marciales y técnicas de guerra musical y luchar por la princesa Leyre.
Leyre es ajena al mundo que le rodea y no imagina las infinitas páginas de un libro muy gordo que hay detrás de los mercenarios. La Reina Alicia llegó desde muy lejos con su guarda espaldas que se mantenía al margen de los ensayos, pero sin quitar ojo a todo aquello que está sucediendo cuidando a su Reina, pero en su interior estaba gozando del espectáculo. De cualquier forma estaban compartiendo técnicas de lucha, porque estaban planeando y organizando conquistar el mundo para la Reina Eva que no estaba este día, pero su voz volaba por la zona. Incluso llegó el campeón del mundo de una lucha parecida al King Boxing, el soldado Raúl y su mano derecha, sin olvidar a la Reina Lourdes Domínguez o incluso al guerrero Germán Alonso. Soldados cómo el Chef Oficial Don José Luis Barbuzano y el actor cómico Aurelio Dominguez fueron testigos del gran acontecimiento en el campo de lucha en lo alto de una montaña de Rumanía.
La Princesa Leyre que será futura Reina del Carnaval, también llegó acompañada de su ejército familiar, que se mantenía al margen de todo éste enredo que resumido en pocas palabras es Puro Arte para volar por encima de la realidad dura que nos rodea, sin entrar en detalles. Hay un Arte y un Después, una mirada de Leyre que después de aproximadamente dos horas de ensayo, le pareció muy poco porque se sentía muy segura rodeada de tantos mercenarios que han vivido guerras inimaginables.
Cuando la obra esté montada, entenderás mejor ésta carta, especialmente para soñadores. Estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del ser humano, el tiempo pasa y jamás volverá.
Por: Juan Santana.
