Hace veintinueve años cuatro amigos se fueron al monte de senderismo, lo cual demuestra qué esta modalidad comenzó hace más de medio siglo, pero iban sin ropa ni calzados de marca. Botas el gallo o botas de cuero que costaban en esa época quinientas pesetas, hasta qué pasaron de moda ancestral convirtiéndose en calzado vanguardista con el nombre “Panamallac” y con la campaña de marketing las subieron a 120 € en menos de tres meses. Pero lo qué realmente quiero contarte, es qué cuando estos cuatro amigos fueron al monte comenzó a llover mucho y encontraron una zona con mucho barro y los cuatro se tiraron al barro.
Estaban todos embarrados y llegaron al pueblo como si fueran figuras de barro vivientes y a partir de éste año comienza la Bajada del Barro en la Atalaya de Santa Brígida, donde tuve la suerte de estar cantando y tocando hace algunos años. Es un fin de semana a tope, con bandas tocando en las calles, exposiciones, asan un cochino en la misma calle y el domingo por la tarde, caminando y bailando detrás de una banda de trompetas y tambores se dirigen hasta el lugar donde aquel día estuvieron los cuatro amigos embarrándose. Así comenzó esta Bendita locura y han pasado veintinueve años, pero este año con el tema del jodido coronavirus, será de forma virtual para no perder la tradición.
Desean invitar al Mundo Entero a embarrarse en las azoteas y conectarse de esta forma gracias a estas tecnologías. Si deseas más información puedes entrar en su feisbuc, Peña del barro, dónde tendrás toda la información y tal vez hasta te apuntas y vacilas un rato. Será el cuatro de Julio y seguro qué será un éxito rotundo, porque dicen que somos de barro, o venimos de Adán y Eva, dicen somos del mono, que venga quién lo comprueba.
Qué interesante son los humanos, ya sea cristiano, mahometano, ya sea canario, sea mexicano, lo que yo pido que se den la mano.
Estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del ser humano, el tiempo pasa y jamás volverá.
Por: Juan Santana.
