Desde el principio Ayuso comenzó a gustar, especialmente por su actitud relajante sin entrar en la rotonda con frases de odio y separatismos de políticos falsos que presumían de ser buenos y pacíficos, cuando justamente eran todo lo contrario.
Personas cómo Pablo Iglesias que repitió un millón de veces, palabras cómo “fascistas, ultraderecha, y el rollo de las amenazas de balas que hasta el momento no aparecen los verdaderos culpables y mientras no aparezcan, desgraciadamente él será el culpable por no haberse estado calladito y dejar trabajar a los cuerpos de seguridad”.
La política sabemos que está muy degradada por culpa de un millón de motivos para no entrar en detalles, pero tenemos que reconocer que el bombardeo de información con la campaña electoral de Madrid, nos fue absorbiendo a gran parte de España y casi todos estábamos atentos al resultado. Personalmente confieso que Pablo Iglesias, a mi me sacaba de quicio por su forma de expresión, por hacer una campaña violenta verbalmente y escupía frases que fomentaban el odio, la desunión y el mal rollo. Y por no hablar de “su mujer”, ¡Si!, su mujer la Ministra de Desigualdad, porque también fomentaba la desigualdad, dando por saco a los demás partidos y no hablar de Amor y Paz, con los tiempos que vivimos, que justamente nos hace falta mensajes de Positividad.
En fin…esperamos que Madrid sea un ejemplo de bienestar, aunque todos sabemos cuál ha sido y será siempre el trabajo de las oposiciones.
Estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del ser humano.
Por: Juan Santana.