El sábado día 6 de febrero compartimos unos minutos con un Policía de Servicio en el sur de Tenerife, dónde no hay tantas movidas cómo en Madrid por ejemplo, pero suman una media de…mejor que no lo escriba.
Comentaba el compañero Policía Local, que solamente en una tarde, han tenido que actuar por actos de violencia de género, robos a domicilios o en plena calle o un intento de suicidio en El Palmar, porque gracias a Dios llegaron a tiempo. Gracias que no les pasó cómo en Los Cristianos al amigo Ángel el Policía Nacional hace años que en menos de un mes hubieron hasta cuatro suicidios y nos contó cuando un joven estaba en la azotea para tirarse y después de un par de horas hablando con él, pensaban que estaba solucionado y cuando se despistó unos segundos se tiró al vacío.
También nos contó un caso un poco gracioso, cuando un joven que estaba en el exterior del balcón para tirarse y cuando logran agarrarlo no pueden levantarlo para meterlo dentro de la casa y estaban los dos Policías asombrados porque tan grueso no era, pero cuando descubrieron que estaba amarrado con el cinto a los barrotes del balcón…no te cuento lo que pasó porque se me olvidó. ¿Se imagina trabajar de Policía y encontrase con una persona violenta y corpulenta puesta hasta el culo de estupefacientes?. He visto hasta cuatro policías para meter a un joven drogado en un coche y les costó muchísimo. Imagino que cada vez tendrán más movidas, porque a más hambre, más robos, más agresividad, más locura y el gran problema es cuando cada vez hay más personas que no les importa que los detengan porque no tienen nada que perder. Además cuando los detienen un par de días, tendrán aunque sea un bocadillo y un zumo y si es un par de meses o años, tendrán techo, cama, comida y más privilegios. Que conste que estamos hablando de las cárceles españolas, las más que molan, porque en otros países sabemos que no es lo mismo. ¿Se imagina trabajando de Policía? Dedica cinco minutos soñando despierto que eres Policía Local, Nacional, Guardia Civil o Seguridad de Locales Nocturnos y no hace falta que compartas el sueño, que sobran realidades.
Estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del Ser humano, el tiempo pasa y jamás volverá.
Por: Juan Santana.
