Desde las nueve de la mañana sales a comprar y descubres una caca fresca de un perro con un tamaño no muy pequeño, porque por la caca y el ladrido podemos imaginar cómo podría ser el tamaño de un can. Era fresquita, hacía poco tiempo que estuvo por la zona el ser humano culpable (porque lógicamente el verdadero culpable es el dueño del animal), pero ¿Quién es más animal?
Éste tema es cansino pero me importa un rábano y gracias a Dios que estamos los pesados incansables, porque si no habrían muchas más cacas dando los buenos días.
¿Qué adjetivo, con qué adjetivo podríamos calificar a los dueños de los perros que cagan dónde tienen ganas?. Estoy convencido de que son guarros hasta en su propia casa, porque yo he tenido perros y la limpieza era obligatoria todos los días. Las personas guarras dejan el sello de esta forma, con cagadas de sus perros en las aceras o carreteras, con las bolsas de basuras en cualquier parte, con los chicles en aceras y un sinfín de pruebas que delatan su incultura.
¿Falta más información?. Falta mucha más información, más caña, multas, insultarles con adjetivos limitados cómo “Guarros, asquerosos, idiotas, ignorantes, imbéciles y otros más que los pongan a su altura”.
¿Cómo es posible que una persona saque a su perro y deje sus mierdas en cualquier parte?. Porque son eso mismo?
Estimado lector, perdona mi mala leche y gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del ser humano, el tiempo pasa y jamás volverá.
Por: Juan Santana.