Noticias Tenerife Santy defiende El Comedor Social de El Fraile en Arona

Santy defiende El Comedor Social de El Fraile en Arona

Santy comenta que el comedor hace una indudable acción social y ha tenido problemas de financiación, pero afortunadamente seguirá abierto. “En su día, la Policía Nacional se llevó los discos duros de los ordenadores debido a que investigaban los hechos que denunció un particular contra una extrabajadora de dicho comedor y al final se ha demostrado que fue una denuncia falsa y el caso está cerrado. Luego hubo un despido, previo varios avisos, de otra trabajadora que incumplió reiteradamente las normas del centro y se le advirtió con varias oportunidades pero hubo que despedirla. El comedor es también albergue, tiene sus duchas y baños, lavandería, se le proporciona ropa a los usuarios, se les ayuda con cualquier trámite burocrático que necesiten hacer y también, y muy importante, realizan labores de inserción laboral”.

A toda persona que quiera conocer el sitio se le invita a pasar por allí, donde su directora estará encantada de darle la información que necesite saber.  “Los aroneros y visitantes tienen obligación de la seguridad que merecen y la que nos hemos merecido siempre, y que ha ido degenerando en calidad de servicio y en número de agentes. Personalmente llevo escuchando promesas inclumplidas desde hace 4 legislaturas, especialmente en esta última, en la que prometieron arreglar los problemas de la Policía Local y hemos visto que no han hecho casi nada de lo que habían prometido. Es un insulto al ciudadano que paga sus impuestos y han terminado la oficina de policía de El Fraile, dónde gastaron dinero sabiendo que no hay agentes de la Policía Local, ni de la Guardia Civil”.

Deberían hacer una jefatura (no oficina) en la entrada de El Fraile, donde más se necesita, que cubra Las Galletas, Costa del Silencio, Guargacho, Guaza, y el resto de núcleos de la zona. “Necesitamos policías en la calle que protejan nuestra fuente de ingresos, que es el turista, de robos por parte de rumanos y otros que vienen a hacer su temporada aquí, de relaciones públicas agresivos que les entorpecen el paseo e incluso les engañan con sus compras, de venta ambulante molesta mientras están tranquilamente disfrutando de una terraza o de la playa, de empresas de excursiones ilegales que ofrecen sus servicios ensuciando nuestros paseos con sus folletos, y otras muchas cosas que no se deben permitir si queremos que el turista siga visitando nuestra tierra”.

 

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