El letrado, José Luis Langa González, y representantes de Acat se reúnen con el director general, Víctor Navarro.
La Asociación Ecologista de Autocaravanas Club Costa Adeje (Acat) recaba el apoyo de la Dirección General de Planificación Territorial, Transición Ecológica y Aguas del Gobierno de Canarias para lograr la regulación de esta práctica en los distintos municipios de Canarias.
“La dispersión de normativas y ordenanzas que hay en Canarias es tal que crea confusión e indefensión entre las personas que tienen una autocaravana, una opción de vacaciones cada vez más utilizada por la seguridad para la salud que supone actualmente”, según indicó el letrado de Acat, José Luis Langa González.
Para hablar de ello, tuvo lugar una reunión telemática en la que participaron el director general de Planificación Territorial, Víctor Navarro; el presidente y la secretaria de la Asociación Ecologista de Autocaravanas Club Costa Adeje (Acat), Ana María Martín Padrón y Juan Martín, respectivamente; el letrado de Acat, José Luis Langa González; y la representante de la empresa canaria Gesplan (Gestión y Planeamiento Territorial y Medioambiental), Sandra de León.
Durante el encuentro se habló de la necesidad de que la práctica del autocaravanismo en Canarias cuente con una normativa similar en todo el archipiélago y para ello, el letrado ha elaborado un informe, que se enviará a la Dirección General de Planificación Territorial, en el que se recoge con precisión la necesidad y la forma más adecuada de regular este uso en Canarias.
Langa González explicó al director general que la asociación de autocaravanas ya se ha reunido tanto con la Fecai (Federación Canaria de Islas), como con la Fecam (Federación Canaria de Municipios), y ambas instituciones “han demostrado su interés por regular el uso de autocaravanas”. Para dar un paso más en esta dirección, el letrado propuso una reunión a cuatro bandas.
Peticiones de Acat
La asociación de autocaravanas pide áreas de descanso y pernocta, puntos ecológicos, la retirada de la señalización no homologada en las vías públicas, incluyendo los gálibos, y también el obligado cumplimiento de la instrucción 08/V-74, del Ministerio del Interior, específica para autocaravanas y campers homologadas, entre otras cuestiones, según explicó el presidente de Acat.
Por su parte, la secretaria de la asociación recordó que “el autocaravanismo genera riqueza local, pues se gasta el dinero en los municipios en las que nos detenemos.
