Noticias Tenerife Juan Santana | La puntualidad entre conductores de TITSA ¿Abrimos o seguimos?

Juan Santana | La puntualidad entre conductores de TITSA ¿Abrimos o seguimos?

Sin ánimos de hacer daño, buscando simplemente la reflexión sobre la Puntualidad, comparto la razón de esta carta. Las guaguas paran en diferentes paradas y algunos pasajeros llegan segundos más tardes por infinitas razones y según el conductor, abren la puerta o los ignoran. Obviamente hay personas de todas las conductas, porque están los que llegan tarde sin querer, que nos puede pasar a todos y los que son gandules por naturaleza, caminando a paso de tortuga descaradamente y en este último caso, comprendemos que algunos conductores cierren la puerta y arranquen siguiendo el trayecto, algo que todos agradecemos. Estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, es el tesoro más valioso del mundo, el tiempo pasa y jamás volverá.

Repito!, no estoy denunciando públicamente a nadie, simplemente que los conductores en sus tiempos del café, reflexionen el hecho de que todos de vez en cuando tenemos un mal día y descargamos la mala hostia con el pobre pasajero que aun llegando medio asfixiado a la misma puerta y todavía no ha arrancado la guagua, no abren y punto pelota, sin olvidar que también hay pasajeros cara duras con el teléfono móvil en sus orejas caminando lentamente como si fueran los reyes del Mambo. La cuestión es que las guaguas salen puntuales de las estaciones, pero luego tropezamos con los atascos o si hay algún accidente que forman colas brutales y todos nos comemos el marrón. ¿Abrimos la puerta porque todavía somos un pueblo y no estamos en Londres dónde corre o te quedas esperando la siguiente?

Cuando tenía treinta años más o menos en Gran Canaria, tenía mi coche en el taller y pedí a mi padre que parara frente a mi casa y mi padre en paz descanse, dijo que a las nueve pasaría frente a mi casa con su Volwagen escarabajo. Bajé a las nueve y cinco, ¿Tu lo viste?,…. Pues no, él pasó a las nueve de la  mañana y por la noche cuando voy a casa de mis padres, mi padre con mucho Amor dijo, “Los impuntuales son unos mal educados y cuando dije a las nueve, tenías que estar esperando porque los aviones salen y punto. Con el tiempo vas agradecerme que seas puntual para todos los asuntos”. Pues sí, la verdad que agradezco que mi padre, haya seguido con su coche sin esperarme, porque lo mismo que yo he hecho con más de un amigo, cuando quedamos a las once de la mañana y a las once y cuarto, arranco y punto pelota. Luego cuando vienen a echarme la bronca, les cuento la misma historia, que les acabo de contar. Nos vemos.

Por: Juan Santana.

 

- Publicidad -spot_img

Articulos anteriores